Raúl López Gómez/Cosmovisión

La duda de percepción o realidad

Sin duda, que a Cuitláhuac García Jiménez, lo quieren relevar del cargo y en ese tema le conviene acercarse más al congreso estatal, porque ahora lo pretenden llevar más a un desgaste muy claro de quitar al Fiscal del Estado, y al final estos diputados de oposición son los que pueden ayudarle a que al gobernador no lo quiten de la silla, tan fácilmente.

La reflexión es simple, desde el centro del país, pretenden quedarse con el control financiero y político del gobierno estatal veracruzano, y ahora desde el fuego amigo, al gobernador que ganó la elección, lo quieren hacer ver mal, y con una incapacidad para gobernar, que es prematuro evaluar, calificar y menos afirmar.

La polarización es parte de la vida diaria en el país, pero en el estado de Veracruz, pareciera que desde el terreno político se está perdiendo el rumbo a unos cuantos días de iniciado el mandato y se perciben escenarios fuera de control.

Descifrar el enigma, del fenómeno de una problemática grave, en donde la gente en general comienza a dar cuenta que algo anda mal con algunos funcionarios que se esparcen en el anonimato, otros en la simulación y hasta quienes viven en el delirante mundo del poder político en el ostracismo.

Valga una excepción al gobernador Cuitláhuac García Jiménez, que realiza un esfuerzo obvio y hasta sobrehumano, para dirigir una entidad en donde en la realidad desde el centro del país, le recomendaron a más de medio gabinete y al parecer sólo pudo nombrar a algunos pocos funcionarios y a su chofer.

No es fácil, gobernar a la entidad más politizada. y valga la metáfora y el respeto para los que se están fajando duro y ahí la llevan en el gobierno estatal cumpliendo a cabalidad, con un gobierno en parvulitos, y entiéndase la palabra en memoria del profesor Carlos Hank González, cuando en una ocasión le quisieron arrimar el caballo con algo que en política no va, y su expresión fue simple: esa es de parvulitos, en la reflexión de que no era creíble, caer en un error de esa dimensión.

Al gobierno estatal, le faltan operadores políticos y la inclusión de gente de experiencia que ayude al secretario de gobierno, Eric Patrocinio Cisneros, que va echándole ganas, pero está presionado desde muchos flancos y por eso los ataques mediáticos que hasta de tinta lo renunciaron de fin de semana en un autentico linchamiento que sólo lo pueden atender con resultados en comunicación social, que no se les ve trabajando.

Pero en la ortodoxia política, las fallas son en varias dependencias en donde se operan con personas que no tienen experiencia y por lo mismo no saben qué hacer en el puesto.

Las crisis del gobierno de Cuitláhuac García Jiménez, es muy simple las presiones vienen de los grupos de todas las instancias que pretenden meterse al presupuesto oficial que tanto anhelan.

Muchos de los cercanos al gobernador en puestos claves no se les conoce, y por el estilo en las diversas dependencias, los secretarios particulares, asesores y todo tipo de personajes no se les ve, y menos pueden contestar el teléfono de las propias llamadas oficiales en donde la queja es simple no se toman la molestia de dar audiencias a la gente que quiere tratar sus problemas, y que deben de trasladarse de cualquier punto del territorio a la capital del estado y prueba fallida, por lo mismo se comienza a gestar una molestia, con grado de irritación y la clásica histeria colectiva en donde se habla de un palacio estatal, con funcionarios encerrados pero sin gente que se atienda, las esperas vacías. Al estilo de los anteriores mandatos.

Esto puede cambiar, con una reunión de gabinete en donde el mandatario estatal, conmine a todos los funcionarios a que aunque sea gasten saliva en atender a los ciudadanos, porque es lo mínimo que pueden hacer.

Los de las áreas del súper delegado, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, están trabajando al máximo y ya se anuncia que la tarea exigida por el presidente AMLO en su pasada visita, ya la terminaron, a ver si es cierto, o de plano el jefe del ejecutivo federal se la va a tener que pasar despachando en esta entidad, ante las exigencias a muchas y grandes expectativas de su propio proyecto político visto desde el Partido de Morena que en estos lares comienza a hacer agua.

También es cierto, el linchamiento mediático es porque desde las áreas de comunicación social del gobierno estatal y del propio congreso veracruzano, se han cerrado a manejos exclusivos de grupos y de cuatachismo en donde cerraron filas con los pocos más cercanos y algunos recomendados. Al tiempo. Así las cosas.