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COATZACOALCOS, Ver., 26 de agosto de 2024.- Hace un año, Sthepanny de Jesús Fraile Suárez tuvo que emigrar al puerto de Veracruz por motivos de trabajo y se vio obligada a llevarse a su pequeño hijo.
En su condición de madre soltera, ha sido para ella muy difícil permanecer en un empleo, por lo que decidió emprender un negocio y así poder solventar los gastos de la educación de su pequeño Sthepan, quien se encuentra en edad preescolar.
En febrero de este año, acudió a preinscriibirlo al jardín de niños Villa Rica, una escuela pública de la ciudad de Veracruz, sin ningún problema, tan es así que pagó la cuota de inscripción de mil 400 pesos el pasado 4 de agosto.
Unas semanas después, el 19 de agosto, logró inscribirlo e inmediatamente fue incluida en un grupo de WhatsApp para estar al pendiente de los pormenores del inicio de clases e incluso, por ese medio, le recomendaron adquirir el uniforme escolar del pequeño.
Fue así como adquirió 3 playeras de 180 pesos cada una, short del diario de 140 pesos y short de educación física de 70 pesos, además de 3 pares de calcetas de color azul marino de 30 pesos cada uno y un par de calcetas blancas con bicolor de 35 pesos, así como zapatos escolares negros de 550 pesos y una mochila básica de 350 pesos.
En total, sumando el transporte, alcanzó a gastar la cantidad de alrededor de 3 mil 225 pesos, sin embargo, a tan sólo unos días del inicio de clases, el jueves 22, recibió una llamada telefónica por parte de la directora de la escuela, quien de manera grosera se negó a darle su nombre, para hacerle saber que su hijo no había sido aceptado en el jardín de niños mencionado.
Esta situación le causó indignación por el trato déspota e indolente de la directora y por el enorme gasto que hizo, por lo que decidió interponer su queja ante la supervisión escolar correspondiente y mostró evidencias de todo lo sucedido.