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COATZACOALCOS, Ver., 11 de abril de 2025.- La Vox Populi la conoce como la Serpiente Asesina, se trata de Autotransportes Quetzalcóatl, que recientemente en menos de una semana generó la amputación de dos piernas.
Dos infortunados hombres de Coatzacoalcos sufrieron la mutilación de una de sus extremidades por culpa de esta empresa de autotransporte criminal, pero una fiscalía pareciera que protege a los culpables.
Pero los habitantes de Coatzacoalcos, el terror ya no anda en las calles, ahora anda sobre ruedas verdes y en menos de una semana, 2 unidades de la Sociedad Cooperativa de Autotransportes Quetzalcóatl destruyeron la vida de dos ciudadanos, dos varones a quienes les amputaron una de sus piernas por culpa de choferes imprudentes y criminales.
Sin embargo, lo más indignante es que uno de los conductores ya fue dejado en libertad por parte de la Fiscalía correspondiente que lleva el caso y el segundo podría ser liberado también si antes no hace nada la autoridad competente.
El primer caso se trata de un abuelo atropellado y mutilado el pasado 3 de abril, la víctima es Gilberto Estrada Hernández, de 65 años de edad; la unidad responsable fue un camión Mercedes- Benz, color verde, placas A-20388-X, con número económico 178.
Don Gilberto circulaba en su bicicleta sobre la banqueta cuando el camión, que venía por el carril central, giró hacia la derecha y lo arrolló brutalmente; el impacto fue tan fuerte que le amputó la pierna y ahora, lucha por su vida en el hospital. El chofer fue detenido, pero la Fiscalía lo soltó y lo dejó libre.
En el segundo caso, un joven conductor de una motociclista fue arrastrado y cercenado de una pierna apenas el pasado 9 de abril; la víctima es Julio César Martínez y la unidad responsable fue un camión verde, placas A-20-255.
En este caso, el conductor se pasó la luz roja en la avenida Universidad Veracruzana por querer ganarle al pasaje y arrolló al motociclista, arrastrándolo varios metros, el resultado fue otra pierna amputada; ahora Julio también está hospitalizado y en estado grave.
Por lo que hace a este segundo conductor, sigue detenido, pero con el vencimiento del término legal para su audiencia inicial en puerta y se teme que también lo suelten, sin importar el dolor y el daño hacia un humano.
De esta manera, dos vidas quedaron truncadas en menos de una semana y dos familias fueron destrozadas; una línea de transporte sigue operando como si nada y una Fiscalía que, en lugar de impartir justicia, protege a los responsables.
Consultados al respecto, especialistas en la materia aseguraron que estos casos no fueron accidentes, sino actos de imprudencia criminal, por lo que se debe exigir que al menos el segundo conductor ya no sea liberado, que se garantice la reparación del daño a las víctimas, que se sancione con todo el peso de la ley a los responsables y que se suspenda y revise la operación de esta línea de transporte asesina.
Así es como Coatzacoalcos ya no se debe quedar callado, pues las víctimas no pueden hablar hoy, pero nosotros sí y mañana, sabremos si aquí manda la justicia o la impunidad disfrazada de autoridad; no es una mañana cualquiera, es el día en que el pueblo debe abrir los ojos.