
Carlos Ramírez/Indicador político
En la suma de grandes escritores que murieron en abril agregamos a Octavio Paz que el 19 de este mes cumple 27 años de haber desaparecido (1998). A los ya mencionados en estos días como premios Nobel, que se fueron en abril, Gabriel García Márquez y Mario Vargas Llosa, añadimos al Nobel de Literatura de México, ya mencionado. Paz murió a los 84 en la ciudad en la que había nacido, la capital de México, precedido por el grave percance de la quema de su casa, que agudizó los males que padecía. Personaje de gran discusión en el medio literario mexicano, gente de izquierda que fue cuestionado en su momento por ese sector, se le reconoce como poeta, escritor, y ensayista y diplomático.
UNA GRAN OBRA POÉTICA Y ENSAYÍSTICA, QUE DEBERÍA PUBLICARSE MÁS
Las obras del único Nobel de literatura que tenemos debería de ser accesible a la ciudadanía, con ediciones populares y baratas. Eso no sucede. Sus obras se enlistan en las bibliotecas desde 1933 hasta entrado el año dos mil, no solo en poesía como su gran poema Piedra de sol sino en su obra ensayística, El laberinto de la soledad su gran ensayo, entre otras. Sale en sus obras famosas, Sor Juana Inés de la Cruz o las trampas de la fe, que fue llevada al cine y que al final volveré a recordar con sus datos. Paz es un poeta que sus críticos califican como difícil de encuadrar en un movimiento aunque él mencionó en varias ocasiones, su debilidad por el surrealismo. Desde muy joven su obra le brindó más de 25 importantes premios y reconocimientos entre ellos el premio Nobel en 1990 ya mencionado, y también se le otorgó el premio Cervantes español.
LAS TRAMPAS DE LA FE Y LA INIQUIDAD CONTRA UNA MONJA Y SUS LIBROS
Hace tiempo vi la película Yo, la peor de todas, basada en Sor Juana Inés de la Cruz o las trampas de la fe, del poeta Paz. Es un filme argentino de 1990, de la directora María Luisa Bemberg con dos famosas actrices de la época, Assunta Serna y Dominique Sanda, la monja jerónima y la virreina María Luisa Manrique de Lara, uncidas en un amor, que se refleja en los profundos poemas de Sor Juana. En la película, cargada de erotismo, se besan. La obra retrata fielmente la inquina que signó la vida de una de las mujeres más brillantes y talentosas que ha dado la historia de México, Juana de Asbaje, considerada a nivel mundial uno de los grandes genios de la humanidad. Escuchar las argumentaciones de los prelados que la condenaron, es escuchar a todos esos oscurantistas que encabezan marchas en apoyo de la derecha. En el filme la sangre hierve cuando se ve a los amanuenses de los altos prelados desinfectar el camino por donde pasaron monjas o lapidar sus habitaciones para no contaminarse. Y más hierve cuando se ve como queman los libros de Juana -grandes ingenios de la humanidad convertidos en cenizas-, se le condena a no escribir y le hacen firmar su dimisión con su propia sangre.
PAZ, CON SU GRANDEZA, EXHIBIÓ EN PLENO EL MARTIRIO A SOR JUANA
Lo más terrible es que eso sucedió en la realidad, y está en esa investigación enorme de Paz, ese ensayo larguísimo -mas de 500 páginas-, en donde la monja es obligada a convertirse en una sirvienta, y desprenderse de todo. Su muerte temprana, casi inducida por su cercanía a las epidemias de la época, segó una vida que ya había sido cercenada. Sor Juana Inés de la Cruz o las trampas de la fe, fue escrito en 1982 y han sido muchas las editoras que lo han lanzado, comenzando por una edición de autor en 1982 en Barcelona; Planeta, el Fondo de Cultura Económica y la editorial Ayacucho de Venezuela, entre otras. Esta última la tiene en línea, gratuitamente.