Quirino Moreno Quiza/Repechaje
Las cosas en torno al Poder Judicial de la Federación (PJF) han llegado al clímax más alto, cuando en una contradicción a lo que debe de ser ese poder, se pretende vulnerar la Carta Magna. Se quiere echar abajo la reforma de ese poder, ya aprobada constitucionalmente y publicada con toda la legalidad. En ese enjuague de ignorancia que han exhibido los que deberían de ser expertos en derecho, está la defensa de sus privilegios, frente a los cuales no les importa colocar a la nación en el peligro de un golpe, aunque la presidenta Claudia Sheinbaum se haya referido a esa posibilidad, como “un golpe muy aguado”. Y por otro lado, ante lo absurdo de que sea el propio PJF el que ponga en peligro la Constitución, el vicepresidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados Sergio Gutiérrez Luna presentó una iniciativa de reforma al PJF, con la que “se reafirma la imposibilidad de que la SCJF se pronuncie sobre la validez de reformas constitucionales”
EN OTROS SITIOS, EL JUDICIAL ES UTILIZADO TAMBIÉN PARA FINES PERSONALES
Hay cierto parecido en lo que está pasando ahora, con lo ocurrido en Brasil en el caso Luis Inácio Lula da Silva y la persecución afrentosa de un juez, Sergio Moro, que lo llevó ilegalmente a la cárcel por 580 días. El tema se parece, porque el mencionado juez, un magistrado, realizó ilegalmente una investigación contra el actual presidente de Brasil, apoyando en todo, a los que realmente ejercían la mencionada investigación. Y todo lo hizo en acusaciones contra el entonces ex presidente para impedir que lanzara su candidatura de nuevo a la presidencia Lo acusó de corrupción y una serie de situaciones ilegales, utilizando al poder judicial y alterando el derecho, en un papel que no tenía nada que ver con su investidura. Cosa que está pasando ahora cuando los mencionados ocho ministros con la caponera de doña Piña, pretenden fuera de toda ley, revisar la Constitución para seguir con sus privilegios
USO DEL PODER JUDICIAL. DETRÁS DEL JUEZ MORO HABÍA CORRUPCIÓN Y ODIO
El juez Moro consiguió la condena usando todo tipo de trafiques apoyado en su puesto judicial como ahora lo hace Norma Piña y logró el encarcelamiento del político. Le dio 9 años y consiguió que otro tribunal cercano a él aumentara la condena a doce años. Pero fue otro tribunal, el Superior, el más alto de aquel país, el que enfrentó a Moro y finalmente liberó a Lula. Los abogados de éste pidieron el encarcelamiento del juez. Pero el poder judicial quedó signado incluso a nivel mundial porque con las denuncias contra Moro y los que lo apoyaron quedó expuesto. Pese a eso, Moro fue incorporado por el ex presidente Jair Bolsonaro a su gabinete, aunque más tarde se descubrió toda una serie de graves delitos, corrupción, uso del poder judicial ilegalmente y la enfermiza persecución contra el líder del Partido de los Trabajadores. En el caso mexicano, la nueva titular del ejecutivo ha sido firme contra todas las amenazas: la reforma del poder judicial sigue adelante.