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ORIZABA, Ver., 19 de agosto de 2019.- Con la plaza La Concordia a reventar; miles de perdonas rodeando el cuadrilátero; la gente animada, en la función de lucha libre Triple A, la noche del sábado el empresario y dos veces alcalde de Orizaba Juan Manuel Diez Francos se subió al ring.
Saludó a pequeños y a grandes. Se tomó la foto con un niño, como un luchador rumbo a una nueva batalla. Avanza en dirección al ring, sonrió, saludó a rudos y a técnicos que se mezclan en la afición.
El coloso del Pueblo Mágico repleto de personas de toda la región, como nunca se había visto.
Resuena en su domo el coro ¡Oé! ¡Oé! ¡Oé! ¡Oé!, en una fiesta de niños enmascarados, de jóvenes que transmiten en vivo por “face”, de papás que crecieron con Blue Demon y mujeres que aplauden efusivamente.
Llegó la hora. Es el héroe de carne y hueso que va a cruzar las tres cuerdas, el luchador que queda arriba del cuadrilátero en el centro de todas las miradas.
Ahí, nuevamente el empresario orizabeño con la gente, sube con una máscara plateada acompañado por el alcalde Igor Rojí, en La Concordia, donde el nombre hace honor a los acuerdos, encuentros y a las decisiones conjuntas por la ciudad.
Se “destapa” por Orizaba
Diez Francos conecta con la afición en medio de la expectativa. Aparece como un nuevo gladiador en el cartel.
De repente se descubre el rostro y genera sorpresa entre los más de 6 mil asistentes reunidos en un evento que es resultado del esfuerzo de empresarios de la región y de la CROM de Orizaba.
Diez entrega un reconocimiento a Súper Porky en representación de la Asociación de Empresarios de Orizaba, un sentido homenaje a la leyenda mejor conocido como Brazo de Plata.
El luchador en retiro le agradece, evita por momentos el llanto, se apoya en una andadera y vive para contar el cariño de Orizaba.
Se lanza y levanta el vuelo
Juan Manuel Diez luce con nuevos bríos, sonríe, lo recuerdan y lo reconocen por la transformación de Orizaba y su distinción con el resto del estado.
Regresa a las gradas donde lo espera uno de sus hijos y convive con sus entrañables amigos Enrique Hernández Olivares, Javier López García, Igor Rojí y Alfredo Hernández Ávila, quien representa a la nueva generación de jóvenes que trabajan por las mejoras del Pueblo Mágico y las industrias de las Altas Montañas.
Sentado a la derecha de Diez Francos, basta revisar de dónde viene y la trayectoria de Alfredo, el único funcionario del estado de Veracruz en estar certificado en atención ciudadana y que hoy se desempeña como Secretario del Ayuntamiento de Orizaba.
El hecho causa revuelo entre los asistentes, la clase política especula y ve en Juan Manuel Diez a un contendiente favorito para tomar nuevamente las riendas de la ciudad.
Con límite de tiempo
Visionario y calculador, Diez sabe que no hay mejor momento para subir al ring que cuando las fuerzas, la experiencia y la plaza pública están de tu lado.
El ex alcalde aprecia que tiene la aceptación de miles y el respaldo de un grupo sólido que le ha demostrado su amistad y resultados para impulsarlo a salir victorioso.
También sabe que esta nueva batalla es con límite de tiempo, por lo que tiene que medir los pasos y la velocidad para avanzar.
Diez ya está arriba del ring por Orizaba…
La pregunta es: ¿A quiénes más subirá?