Pablo Jair Ortega/Columna sin nombre
En esta ocasión, nos saldremos un poco del análisis de temas políticos y procesos electorales que comúnmente tratamos, vamos a exponer un tema de un amigo que posiblemente sea el caso de muchos compañeros, quienes de alguna manera fueron propulsores e iniciadores de una lucha social y política que se cristalizó con el triunfo del Lic. Andrés Manuel López Obrador en el 2018.
Su historia…
Arcadio es su nombre, quienes lo conocemos desde hace más de 40 años le decimos Cayito, de oficio carpintero, él al igual que otro compañero que era su compadre, José, mejor conocido como Pepe Fernández (QEPD), pertenecieron al PMT, partido fundado por el Ing. Heberto Castillo Martínez, donde se militaba por convicción y se aportaba cuotas para ejercer las actividades propias del partido y casi en la clandestinidad por el control caciquil de los gobiernos priístas en esa época, los volantes del partido uno los pagaba y también los distribuía.
Del PMT se transitó al PMS y posteriormente, al PRD, Cayito vivió todos esos cambios hasta llegar a Morena, se convirtió en un fiel admirador de AMLO, en la colonia donde vive era el punto de reunión de los candidatos de oposición, cuando muy pocos querían recibirlos, ahí desfilaron casi todos; después del 2015, la ciudad de Coatzacoalcos se volvió color guinda con el triunfo de la Ing. Rocío Nahle como diputada federal.
El tema es que hoy Cayito ya es un hombre de edad avanzada y aunque los años y los problemas familiares se le acrecentaron, él sigue dando la batalla para poder sostener a su esposa enferma y a una nieta que la crio como su hija, Lucy heredó el carácter de su abuelo, es una guerrera que no se dobla, pero que la enfermedad que padece se ha agudizado, tiene deformación de huesos progresivo, es Lic. en Administración de empresas, un tiempo dio clases en una universidad, pero la tuvo que dejar, actualmente se dedica a hacer repostería y con dificultades salía a vender sus productos, la enfermedad avanza y ahora ya no puede caminar, se desplaza en una sencilla silla de ruedas, aun así trata de ayudar a sus padres abuelos.
La ingratitud…
Cayito comenta que ha solicitado ayuda a algunos compañeros que les hizo justicia la Revolución y sólo le dan largas o de plano no lo reciben, cuenta que es frustrante que aquellos a quienes alguna vez recibió en su casa ahora ya ni se acuerdan de él, demás está decir que en el municipio los nuevos funcionarios «izquierdistas» de Morena simplemente son para él unos completos desconocidos y si ubica a algunos, es porque eran adversarios políticos priístas de antes y ahora ya son morenistas, los pocos de los que él llama de la vieja guardia de la izquierda, parece que cuando lo ven, les recuerda esa etapa de patea latas con origen humilde en busca de justicia social y ahora que ya comen con manteca, es como si tuvieran pesadillas y les resulta mejor vivir rodeados de quienes son aduladores por antonomasia y profesionales para vivir del presupuesto gubernamental y los hacen sentir el sueño de disfrutar la plenitud del pinche poder, al cual se refería un ilustre exgobernador, el cual por cierto parece ser que ya también sus excolaboradores y familiares son amantes del color guinda y colaboradores de un gobierno al que en campaña denostaban y agredían a sus candidatos y promotores.
Estoy seguro que hay muchos Cayitos que andan por ahí, arrastrando su frustración de ver cómo muchas cosas cambian sólo de color y quienes de alguna manera contribuyeron desinteresadamente buscando un cambio de régimen, hoy mínimamente deberían ser atendidos en sus necesidades básicas, ya no digamos que se les reconozca su trayectoria de lucha social y política, que se les cumpla en sus derechos humanos de bienestar, salud y vida digna y un poco de empatía solidaria de quienes él considera sus líderes y amigos.
PD. Nadie sabe para quien trabaja, al final siguen gobernando las mismas caras con diferente color y los de izquierda sólo sirven para legitimarlos.
PD 2. Si después de haber leído estás líneas, deseas apoyar a Cayito y su familia para su atención y tratamientos, aquí te dejo sus números para mayor información
921 252 1760
921 273 3288
Si te nace hacerles un donativo, no te olvides pedirles un número de cuenta, este mundo necesita plegarias, pero la gente necesita acciones que mejoren su vida y gobernantes sensibles a sus demandas.