Raúl López Gómez/Cosmovisión
* DÍA CLAVE PARA EBRARD
Con el pronunciamiento que a favor del apretado triunfo de Porfirio Muñoz Ledo en la encuesta del INE hicieron desde Veracruz conjuntamente el aspirante a la dirigencia estatal de Morena, Esteba Ramírez Zepeta, y el coordinador de los diputados locales Juan Javier Gómez Cazarín, el grupo del gobernador Cuitláhuac García se definió abiertamente por la corriente morenista de los llamados “puros” que no sólo pretende asumir el control absoluto del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del partido obradorista –pues ya tiene asegurada la Secretaría General con la senadora Citlalli Hernández– sino también impulsar el proyecto futurista de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, quien en la adelantada sucesión presidencial compite con el canciller Marcelo Ebrard, cuyo alfil en la contienda partidista, Mario Delgado, es presionado para que decline por el exlíder del PRI y PRD.
Este lunes podría ser definitorio para las aspiraciones de Ebrard y Delgado, pues Muñoz Ledo se autoproclamó “presidente legítimo” y amagó con tomar posesión de facto de la dirigencia nacional de Morena. De consumarse esta intentona, el canciller sería prácticamente aniquilado de la sucesión presidencial por el ala radical del morenismo.
De hecho, Muñoz Ledo ya había arremetido en contra de Ebrard por su presunto enriquecimiento inexplicable –recursos que, deslizó, usaría para construir su candidatura presidencial–, amenazándolo hasta con expulsarlo del partido.
En los últimos días, casualmente después de su habilidosa operación de la polémica visita del presidente López Obrador a Washington –la que lo reposicionó como fuerte aspirante para suceder a AMLO en el 2024–, Ebrard ha sido sometido a un intenso golpeteo interno. Esta semana sorprendió la gira que por Europa realizó Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del Presidente, para entrevistarse con la representación oficial de su esposo con el Papa Francisco.
Días antes, Ebrard fue exhibido con el nombramiento de Luz Elena Baños Rivas como “Embajadora Eminente”, un cargo distintivo que por ley sólo pueden recibir embajadores con más de 10 años de trayectoria, cuando la representante de México ante la OEA sólo tenía dos años. A pesar de que esta designación irregular violaba las leyes del Servicio Exterior Mexicano, el canciller envió la propuesta para autorización y firma del Presidente. Baños Rivas tuvo que dejar a los cinco días este relevante cargo.
Ebrard, por cuya habilidad política se ha ganado la animadversión de más de medio gabinete obradorista, tampoco goza mucho de la simpatía de los familiares cercanos del Presidente, cuyos afectos personales y afinidades ideológicas les unen más con la Jefa del Gobierno capitalino, su principal adversaria para la sucesión presidencial de 2024 y cuyo grupo le disputa con Muñoz Ledo a la cabeza el control de la dirigencia nacional de Morena.
Sabidas son, por ejemplo, las fuertes fricciones que ha tenido con Martha Bárcena, actual embajadora de México en Washington y tía política de Gutiérrez Müller, quien en la víspera de la elección presidencial de 2018, a través de su exjefe, el excanciller Luis Videgaray, habría acercado a López Obrador con el entonces presidente Enrique Peña Nieto, quien habría proporcionado una línea telefónica de Los Pinos para hablar directamente con el tabasqueño, quien ya se perfilaba como el inminente triunfador de los comicios.
La diplomática, cuyo nombre completo es Martha Elena Federica Bárcena Coqui –originaria del puerto de Veracruz, donde nació el 2 de marzo de 1957–, es esposa del también diplomático Agustín Gutiérrez Canet, tío de la esposa de AMLO.
Cuando inició el sexenio de Peña Nieto, la señora Bárcena era embajadora de México en el Reino de Dinamarca y luego, de 2013 a 2017, ocupó la embajada de Turquía y posteriormente, de 2017 a 2018, fue Representante Permanente de México ante las Agencias de la ONU con sede en Roma: la organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Programa Mundial de Alimentos (PMA), el Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA), así como el Consejo de Gobierno del Instituto Internacional para la Unificación del Derecho Privado (UNIDROIT).
En diciembre de 2018, Bárcena fue propuesta directamente por el presidente López Obrador como embajadora en Estados Unidos, siendo la primera mujer en la historia de México en ocupar dicho cargo.
Según una versión del columnista Raymundo Rivapalacio publicada a mediados de enero de este año, la relación entre Ebrard y Bárcena es tirante desde que el canciller habría pedido al Senado atrasar la ratificación de la embajadora en Estados Unidos, mientras buscaba supuestamente abrir una oficina alterna en Washington, manejada por una tía de Javier López Casarín, un viejo amigo del canciller que preside honoríficamente un consejo técnico académico y científico dentro de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Pero Bárcena presuntamente descubrió la maniobra de Ebrard y lo confrontó, acusándolo además con López Obrador, con quien tiene comunicación directa.
A principios de enero, también, se dio un desagradable incidente en la reunión de embajadores y cónsules en Palacio Nacional. Bárcena se quejó en Twitter que en la reunión con el Presidente la habían dejado en las últimas filas, y la prensa identificó al jefe de Oficina de Ebrard, Fabián Medina, de haber sido el causante de lo que se percibía como un atropello.
Rivapalacio relató además que en la primavera de 2019 le adjudicaron a Ebrard la filtración del borrador de la carta que había enviado el presidente López Obrador al rey de España, Felipe VI, exigiendo una disculpa por la Conquista, con lo cual se saboteó la negociación llevada directamente por la esposa de AMLO, Beatriz Gutiérrez Müller, sobrina política de Bárcena, con la ministra de Justicia española, Dolores Delgado.
“El canciller, contra lo que se piensa fuera de Palacio Nacional, no es de la confianza de López Obrador, y en el entorno más cercano al Presidente, lo consideran un ‘traidor’. Pero ha sido altamente funcional al Presidente, donde radica su exposición y prestigio en la opinión pública. Aunque parece prematuro, para nadie en el universo de Palacio Nacional, este tipo de escaramuzas están relacionadas con la sucesión presidencial de 2024, donde la candidata emocional en el entorno presidencial es la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum”, reseñó desde hace nueve meses el columnista.
Por eso hoy, lunes, podría ser un día definitorio para las aspiraciones presidenciales de Ebrard.