Bernardo Gutiérrez Parra/Desde el Café
Este lunes 18, a las 10:00 horas de la mañana, el primer funcionario estatal que comparecerá ante el Congreso local con motivo del sexto y último informe sobre el estado que guarda la administración del gobernador saliente Cuitláhuac García, será Carlos Juárez Gil, un politólogo tabasqueño que inició este sexenio como subsecretario de Gobierno en diciembre de 2018 y quien casi cinco años después, el 14 de octubre de 2023, asumió la titularidad de la Segob cuando Eric Cisneros Burgos decidió renunciar por su fallida aspiración de ser el candidato de Morena a la gubernatura.
Juárez Gil, a diferencia de otros ex secretarios que le antecedieron, no dejará ningún histórico precedente por el que se le recuerde en beneficio de los veracruzanos. Algunos lo atribuyen a su improvisación y falta de experiencia pues, según el registro de profesiones, apenas se había titulado como licenciado en Ciencias Políticas y Administración Pública en 2019, hace cinco años, cuando ya estaba en la función pública. Esta licenciatura la cursó en la desconocida Escuela Libre de Ciencias Políticas y Administración Pública de Oriente, y posteriormente estudió una maestría en Gobierno impartida por el Colegio de Veracruz (Colver), de la cual se tituló el año antepasado.
Sin embargo, si últimamente ha llamado la atención de los medios locales de comunicación no ha sido por su trabajo y legado político sino por su inexplicable riqueza y los escándalos de sus presuntos parientes, como fue el caso del jovenzuelo Maximiliano Zea Salas, quien hace a principios de octubre pasado agredió violentamente a una pareja en la Plaza Ánimas, de Xalapa, y ningún elemento de seguridad privada se atrevió a detenerlo porque presumió ser sobrino del alto funcionario del gobierno cuitlahuista.
Hace un par de semanas, por ejemplo, se difundió también en redes sociales que allá en el sur de Veracruz, en los límites con el estado de Tabasco, se encuentra un fastuoso rancho de más de cien hectáreas con imponentes caballos pura sangre, cuya propiedad le adjudicaron al actual titular de la Segob.
El rancho se llama “El Veinticinco” y en las fotografías que se exhibieron se ve todo vallado e impecablemente cuidado, con cámaras de vigilancia, personal de seguridad y cría de ganado de la raza Brahman Americano. También se observan imponentes equinos, como el llamado “Tormenta”, que se presume es el más valioso de todos.
La presunta propiedad del secretario de Gobierno está casualmente en la región de Las Choapas, donde en enero de 2021 ocurrió una matanza por un conflicto entre ganaderos que intentaron minimizar lo que realmente ocurría en ese municipio sitiado por tres grupos de autodefensas, cuyos miembros pretendían imponer su ley secuestrando y asesinando a grupos contrarios.
Han transcurrido 14 días y Juárez Gil no ha dado explicaciones sobre cómo adquirió esa millonaria propiedad. Tampoco se sabe que provenga de una familia acaudalada. Y es que por lo menos diez años antes de que Cuitláhuac García llegara al poder, este tabasqueño vivía y vestía muy modestamente. Así se le observa en algunas antiguas fotografías que circulan, en las que se le ve junto con el actual mandatario, así como con Esteban Ramírez Zepeta, hoy dirigente estatal de Morena, y otros que por esas fechas eran humildes militantes del recién fundado partido obradorista y que en esta administración gubernamental que está por concluir también son señalados de hacerse presuntamente de millonarios bienes inmuebles, como el coordinador general de Comunicación Social, Iván Joseph Luna Landa.
Ahora, el titular de la Segob y Ramírez Zepeta terminan el sexenio de García Jiménez como propietarios de impresionantes ranchos en el sur del estado con ganado de alto registro.
¿Cómo le hizo Carlos Juárez, si su modesto salario como funcionario estatal no supera oficialmente los 80 mil pesos mensuales?
La versión que circula en las redes sociales es que la vida de Juárez Gil cambió radicalmente desde que asumió la Subsecretaría de Gobierno y luego su bonanza se disparó en cuanto ascendió a la titularidad de la Segob por la calentura política de Eric Cisneros de suceder a Cuitláhuac García en la gubernatura.
Dicen que la gobernadora electa Rocío Nahle posee información de primerísima mano, supuestamente proporcionada por otro ex subsecretario de sus confianzas que estuvo cuatro años en esa Secretaría en la que su otrora operador político, Eric Cisneros, ejerció un inmenso poder que ni otros ex secretarios que posteriormente llegarían a ser gobernadores, como Dante Delgado Rannauro y Miguel Ángel Yunes Linares, no pudieron emular porque los mandatarios que los designaron, Fernando Gutiérrez Barrios y Patricio Chirinos Calero, fueron políticos de carácter y probado oficio que sí sabían gobernar.
HOTELES DE XALAPA HASTA
EL TOPE ESTE FIN DE SEMANA
A pesar de los serios problemas de tráfico vehicular y del pésimo estado de las carreteras federales del norte, centro y sur de la entidad veracruzana, este fin de semana se registró en Xalapa una extraordinaria afluencia de visitantes.
Anteayer sábado, por ejemplo, hubo en el salón social del Suterm una cena-baile con motivo de la celebración del 43 aniversario de la banda musical Rams, del estimado amigo oriundo de Altotonga, Carlos Darío Arcos. Y un matrimonio que viajó por carretera desde la Ciudad de México y llegó tarde al evento, se excusó muy apenado con sus invitados de mesa porque no había encontrado habitación disponible en ninguno de los principales hoteles de esta ciudad capital, por lo que finalmente no tuvieron más opción que rentar una habitación… ¡de un motel de paso!
Por cierto, el evento artístico organizado por el músico y ex alcalde de Altotonga logró una gran concurrencia, y hasta el ex secretario de Gobierno y ex procurador general de Justicia del estado, Reynaldo Escobar, llegó acompañado de su familia a pesar de que tiene serios problemas para caminar, por lo que dijo, en plan de broma, que tuvieron que subirlo cargando como Tlatoani, ya que para ascender al segundo nivel del salón propiedad del sindicato de electricistas no hay elevador ni rampa para sillas de ruedas. Sin embargo, el ex alcalde xalapeño disfrutó de la velada en compañía de varios amigos presentes que desfilaron para saludarlo afectuosamente.