Ruperto Vázquez Ovando/Opinión en línea
A principios de febrero de 2021, representantes de más de 33 organizaciones de la sociedad civil que crearon la red “Ciudadanos por México” manifestaron públicamente su extrañamiento a la coalición “Va por México” –integrada por PAN, PRI y PRD– porque en sus listas de candidatos a diputados federales excluyeron a destacados líderes ciudadanos que se han distinguido por su honorabilidad, representatividad y alto compromiso social con el país.
La mayoría de las críticas, no sólo de los ciudadanos sino también de sus propios militantes, fueron hacia el PAN y el PRI cuyas dirigencias nacionales se agandallaron las primeras posiciones en sus listas de candidaturas plurinominales para sí mismos, amigos, juniors y familiares.
El caso más patético fue el del Revolucionario Institucional, cuyos líderes, encabezados por Alejandro Moreno, no lograban entender aún el demoledor mensaje de la ciudadanía en la elección de 2018. Y es que la dirigencia de “Alito” Moreno desdeñó en el reparto de estas nominaciones de Representación Proporcional a sus gobernadores, estructura territorial, organizaciones obreras y hasta a las Fuerzas Armadas, sectores que tradicionalmente proponían a un representante ante la Cámara baja del Congreso de la Unión. Tampoco cedió espacios a sus cuadros más experimentados en materia legislativa y debate parlamentario. Moreno Cárdenas se autoasignó la posición número uno mientras que su secretaria general Carolina Viggiano se registró también junto con su esposo Rubén Moreira y su hijo Juan Pablo Beltrán Viggiano, colocado como suplente de Marco Mendoza, secretario particular de la ex candidata perdedora a la gubernatura de Hidalgo.
Además, militantes que exigieron la renuncia del campechano reprobaron la inclusión de los hijos del ex gobernador de Tlaxcala, Mariano González Zarur; del senador yucateco Jorge Carlos Ramírez Marín; del ex líder del Senado, Emilio Gamboa Patrón –señalado como miembro de una red de pederastas por la periodista Lydia Cacho en su libro “Los Demonios del Edén”–; del ex mandatario oaxaqueño José Murat, quien aparte de su vástago Eduardo Murat Hinojosa colocó también a su cuñada María Guadalupe Alcántara, y de Carlos Miguel Aysa, sustituto de Moreno en el gobierno de Campeche, a quien el presidente Andrés Manuel López Obrador designó embajador de México en República Dominicana luego de que su hijo renunció a la bancada del PRI y votó a favor de la boicoteada reforma eléctrica de Morena.
Otra a la que le regaló la diputación plurinominal fue a Lorena Piñón, pese a que algunos militantes de su entidad natal no la reconocen como legítima representante del priismo veracruzano, pues argumentan que en el proceso interno de agosto de 2019 –en el que se inscribió como candidata a la presidencia del CEN el PRI para servirle de comparsa a Moreno Cárdenas y arremeter en contra de la exgobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega, y del exmandatario oaxaqueño Ulises Ruiz, enemigo de los Murat– apenas obtuvo en Veracruz mil 314 votos, mientras que “Alito” sumó 45 mil 073 y Ortega, quien ahora milita en Movimiento Ciudadano, 5 mil 423.
Otra a la que le regaló la diputación plurinominal fue a Lorena Piñón Rivera pese a que en su entidad natal no la reconocen como legítima representante del priismo veracruzano, pues argumentan que en el proceso interno de agosto de 2019 –en el que se inscribió como candidata a la presidencia del CEN el PRI para servirle de comparsa a Moreno Cárdenas y arremeter en contra de la exgobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega, y del exmandatario oaxaqueño Ulises Ruiz, enemigo de los Murat– la oriunda de San Rafael apenas obtuvo en todo Veracruz mil 314 votos, mientras que “Alito” sumó 45 mil 073 y Ortega, quien ahora milita en Movimiento Ciudadano, 5 mil 423.
Este martes, la mayoría de los ex dirigentes nacionales se reunirá con Moreno para buscar salidas de emergencia para la supervivencia del ex partidazo tricolor. ¿Bastará con la renuncia del campechano, si es que logran persuadirlo?
El ex diputado federal José Encarnación Alfaro, un economista, abogado y político sonorense, quien fue dirigente juvenil priista, coordinador de la estructura territorial en la campaña presidencial de Luis Donaldo Colosio en 1994 y posteriormente, en 2012, secretario de Organización del CEN del PRI, puso este lunes sobre la mesa la evaluación de los resultados electorales que elaboraron las corrientes Movimiento Líder, Plataforma PRI y Alianza Generacional, e hizo también un llamado al PAN y al Partido de la Revolución Democrática para hacerles ver que la alianza con Alejandro Moreno no es una alianza con el Revolucionario Institucional.
“Tenemos una dirigencia fallida e incompetente que está interesada en hacer prevalecer sus intereses”, señaló.