Gabriel García-Márquez/Sentudo común
El paradigma de la navidad
Siempre en la Navidad, con la conmemoración del nacimiento del hijo de Dios para el mundo cristiano sirve al momento de reflexión y la unión de los seres humanos, desde la familia, el trabajo, los vecinos y en todas aquellas obras necesarias de ayuda a los que menos tienen, sí a los pobres, que fueron, son y siguiendo la inspiración del mensaje de sacrificio de Jesús de Nazareth.
La celebración de la navidad en el orbe, se ha dado en esta ocasión con un cambio en el paradigma, se observa mayor integración entre unos y otros, se percibe un clima de respeto y de paz, como nunca antes se había vista en los últimos años.
Con los problemas normales de los gobiernos en el mundo que propician la pobreza y por ende la migración de quienes no resisten el poderío y el maltrato a los derechos humanos.
Aunque, se da en esta ocasión un impasse en los momentos violentos de antes en el mundo de las guerras ancestrales, vigentes en esta época en donde las naciones poderosas que se reparten el planeta poco hacen para frenar la violencia y la muerte de seres inocentes a causa de los conflictos por el poder político y económico.
Este año, a punto de concluir, deja una profunda huella, entre las grandes protestas sociales, de estudiantes, obreros y de mujeres, que alzan la voz para exigir respeto o mejor dicho piden el freno a los abusos de poder que se dan desde los gobiernos que no son sensibles a los problemas de las grandes mayorías.
Poco a poco con la llegada de la navidad se han ido apagando, las acciones violentas de los gobiernos en el mundo que detentan el poder para seguir en la opresión de la gente, sí de los más débiles, los pobres que rehúyen a su destino de no permitir caer entre las víctimas de los poderosos y por lo mismo la apuesta a los sufrimientos inimaginables de la migración son la única salida que les queda al ya no poder resistir abusos y la inseguridad en muchas naciones en el orbe, que se conducen como siempre ha sido, olvidando los principios de la política de servir a los débiles.
En Latinoamérica, crece un movimiento reformador del poder público, y poco a poco se van agotando los modelos de gobiernos que causan opresión al pueblo, y sólo buscan explotar y esquilmar a los débiles, a los pobres y clasemedieros.
En México, el cambio de paradigma se ha visto positivo, con la llegada a un año del presidente Andrés Manuel López Obrador, al poder político con el Partido Morena, y poco a poco se han ido modificando las políticas públicas depredadoras del viejo régimen, que se han ido cambiando, a pesar de las resistencias a un cambio natural y pacífico, por el agobio de los más de noventa años de abusos de poder, corrupción e impunidad del viejo régimen, al que muchos le siguen llorando, por ese cambio anhelado por la vía de la democracia, sí del voto popular,
El presidente AMLO, en todo un año de mucho trabajo, de esfuerzo física por las agobiantes jornadas de trabajo desde muy temprano y las giras de fin de semana por el interior del país, poco a poco va pacificando con acciones de mucha sensibilidad y tacto político, el deteriorado tejido social.
En este año de difíciles acontecimientos, de contrastes y del cambio de régimen, con mano suave pero muy firme, el presidente López Obrador, da al país la certidumbre que se requiere para consolidar lo que la gente quiere, mayor seguridad, oportunidades laborales y un mejor nivel de vida,
Esto se está logrando poco a poco y se ve el avance, aunque las resistencias de los ricos y poderosos se van diluyendo.
La masa, el pueblo está contento y feliz en este país, se ven los avances a un cambio de régimen, y el hombre que tiene ese compromiso social, humano e histórico, no claudica a sus convicciones de carácter y tozudez, de seguir adelante a su compromiso de apoyar a México a salir de la pobreza y de la inseguridad, que los pasados gobiernos neoliberales dejaron por el abandono y la simulación, que está a la vista.
El presidente Andrés Manuel López Obrador, junto a su esposa Beatriz Gutiérrez, envió un mensaje navideño al país, y reafirmó su compromiso con los pobres e indígenas del país, y recordó al nacimiento y sacrificio de Jesús de Nazaret por los pobres, sí por toda la humanidad.
En se sentido, AMLO, en esta navidad, con su mensaje renueva los sentimientos de unidad y de compromiso con todos los mexicanos, pero en especial con los que menos tienen.
En otro asunto, la ciudad de México, resiente en la última semana los efectos del paso del tiempo en dos mercados de mucha tradición que han sucumbido a los efectos de la desgracia a causa del fuego, se trata del Mercado de San Cosme y ahora el de la Merced, que al parecer una falla eléctrica provocó el incendio.
De igual manera en Paris, después de muchos años, la misa de gallo, en la Catedral de Notre Dame, no se pudo realizar a causa del siniestro que casi acabó en este edificio emblemático del cristianismo en Europa, ahora se celebró la natividad en otra iglesia de forma temporal, mientras se procede su reconstrucción que llevara varios años.
El Papa Francisco en el Vaticano, de igual forma en la misa de gallo, dio un mensaje especial al mundo por los pobres, y en Belén, peregrinos de todo el mundo se congregaron a la celebración por la navidad en este lugar emblemático para el mundo cristiano. Así las cosas.