Raúl López Gómez/Cosmovisión

Sin estridencias en el nuevo régimen

El nuevo régimen en el país, está en pie de lucha, venciendo resistencias y por supuesto intentando cambiar las anquilosadas estructuras, que no será tarea fácil.

Por eso, hay quienes se desesperan al ver que las nuevas reglas de la política en este momento ya cambiaron, y se está dando un proceso gradual de lucha en contra de la ausencia de justicia social por décadas y que el presidente Andrés Manuel López Obrador, al amalgamar a una histórica fortaleza de apoyo de los millones pobres y clasemedieros, para muchos esto les resulta molesto y hasta peligroso, para sus propias causas.

El cambio de paradigma el mundo de los gobiernos que tienen el respaldo popular como el de AMLO, son reconocidos por quienes saben, que son pocos los líderes que mediante el discurso, la resistencia pacífica y el voto electoral hacienden al poder, más tarde que temprano, porque se persisten en sus ideales. “soy tozudo y ya me conocen” dice el político tabasqueño.

AMLO, el fenómeno mexicano en materia de política y de cambio de las estructuras gubernamentales que se reconoce en el orbe, aquí generan escozor en quienes han tenido una vida llena de privilegios y con el tema de guerra en contra de corrupción e impunidad, por lógica el mensaje no les gusta y se resisten a creer que han perdido terreno en lo que antes nunca combatieron.

Los casos de los ex presidentes Fox, Calderón y Peña, son parte de una lucha cautelosa del nuevo gobierno de AMLO en donde en sus conferencias mañaneras suelta los buscapiés y hasta mensajes cifrados a veces y en otras una declaración abierta, provoca reacciones en quienes no quieren dar cuenta que el régimen anterior ya feneció y ahora es otro modelo de partido en el poder con la Morena que a todos cautiva y a otros los enloquece.

Aunque AMLO, se ve que a ninguno los va a llevar a la sombra, y en igual forma no anda persiguiendo de forma personal a nadie y no es su estilo. Por el momento.

Sin estridencias, con la prudencia de la mano suave pero muy firme, el presidente López Obrador, sigue tejiendo fino, va por los acuerdos de civilidad política, y aunque en ocasiones cuando toca alguna herida o llaga profunda de intereses hasta puede dar para atrás, a fin de no afectar a personas inocentes dedicadas a un trabajo honesto como en el caso de las guarderías y otros más.

No habrá consignaciones dolorosas o dolosas, ni golpes de timón con cacería de brujas, tampoco barrer para atrás o escupir para arriba, ni menos chivos expiatorios, simplemente a AMLO se le percibe como un político que opera en la ortodoxia de los antiguos formatos en donde no quiere realizar ninguna operación cucaracha que ponga a correr a todo el mundo y de mayor riesgo para la gente en común.

Por eso las contradicciones y rumores de una libertad de expresión que se premia, se da y se exige a diferencia de antes de tanta persecución y golpes a los gremio del periodismo por muchas décadas. Desde Manuel Buendía y los cientos de reporteros caídos en el cumplimiento del deber.

Ahora, se ve cierto aire de libertad, pero en el papel hay quienes se niegan a dar mérito al gobierno del nuevo régimen en turno.

Los resultados a evaluar del nuevo gobierno federal y en los estados del partido Morena, quizás tardaran algunos meses más para darles el beneficio de la duda y la oportunidad de que se acomoden en la silla, porque muchos mediáticos y defensores del sistema anterior a ultranza, se niegan a creer o darle cuando menos algo de tiempo a los famosos morenos, que van con un nuevo manual, sí un nuevo librito que no es el de antes al que tanto se acostumbraron.

Algunos optan por el silencio, otros por la agria critica consuetudinaria, y hasta las esquizofrénicas de aquel que le daban sus tranquilizantes para poder gobernar y evitar que se convirtiera en un chivo en vidriería y que en realizad lo fue, con serios problemas de corrupción, que ahora ya nadie se acuerda, pero todo existe en la memoria histórica y periodística de este país.

La civilidad política sería importante, claro los que ahora son oposición y nunca lo fueron debe de asumir su papel, y también rumiando la derrota como lo hacen los jerarcas del PRI, que aprenden rápido a ser antagonistas, ahora.

Esperan que los nuevos tiempos de vayan calmando y que los de las resistencias al cambio entiendan que su tiempo ya pasó y ahora, a recoger varas.

Los chismosos y todológos expertos en la comunicación, andan esparciendo información sin confirmar que el diputado veracruzano con licencia Héctor Yunes Landa, estará tres meses ausente, porque se va atender de todo un “overhauling” de salud, incluyendo el tema del equilibrio del peso corporal y hasta una nueva imagen por aquello de las dudas y estar listo para lo que viene.  Entiéndase en la metáfora laminación y pintura y lo que se requiera para quedar como nuevo.

En Boca del Río, el alcalde Humberto Alonso Morelli, entregó material deportivo para los niños de la Escuela Primeria Revolución Mexicana de la Colonia Tamsa.

Se trata de un programa que se inició en este año y se realizan equipamientos y las rehabilitaciones de las canchas deportivas de las escuelas públicas y se les dotan de los implementos para que los niños practiquen deporte como futbol, vóley  y basquetbol.

El fomento del deporte ha sido una de las primeras acciones que inició el gobierno municipal boqueño, al implementar también un programa de rehabilitación y mejoramiento de los espacios deportivos en áreas públicas abiertas a toda la población.

Y en la ironía jarocha, dicen que los Tiburones Rojos sólo le ganan niños y jóvenes de los torneos de copa y por eso van hasta la final, pero en la liga, siguen en blanco. Así las cosas.