
Guerra de aranceles entre EU y China, oportunidad dorada para México
Guerra de grupos políticos
Clásicos del oportunismo político, los distintos grupos y rodeólogos andan muy nerviosos en la sensación inequívoca de buscar acomodo lo antes posible en el próximo gabinete del gobernador de Morena, Cuitláhuac García Jiménez, quien se ha mantenido cauto y a distancia de los múltiples tiradores a diversos cargos que pretenden llegar al abordaje con el chantajismo que no les ha funcionado y por eso ahora lanzan las guerras mediáticas para tratar de ejercer la presión en esa anhelada búsqueda de cargos de poder.
En la realidad los distintos grupos de poder asoman la aguda mirada y cuando salen los nombres de algunos personajes en cargos y hasta en el tema de los nombramientos del equipo para la recepción del poder estatal, de inmediato las criticas despiadadas y las quejas de que no ven muchas posibilidades de acomodarse,
Al gobernador electo de Veracruz, ya con casi una distancia de veinte días para asumir la capitanía de un barco muy grande, que requiere de abundante combustible para navegar y por lo mismo, la tripulación de diestros en las operaciones de las diversas áreas para que la embarcación pueda navegar en un mar lleno de tempestades y en donde abundan los tiburones, principalmente.
Las presiones no han surtido efecto y poco a poco se darán a conocer los nombres de los cargos de relevancia que aún están por darse, la presencia del licenciado Felipe Sosa Mora entre los personajes que asumirán una función de primer nivel puso de inmediato nerviosos a muchos. Pero hay que decirlo que tiene experiencia y en varios años se ha mantenido realizando actividades empresariales con lo que demostró capacidad para estar afuera y adentro de la actividad política y por supuesto tiene talento y juventud.
En otro asunto, la tragedia de los casos que se dan a causa de la inseguridad ponen a Veracruz en las esferas mediáticas nacionales e internacionales por la dimensión de los hechos y la trascendencia del dolor que se genera entre la población por las muertes violentas de cuatro jóvenes en distintas zonas del estado.
Entre la partidocracia sólo la leña al fuego y a estar en las abultadas nóminas de siempre para criticar y denostar, sin que antes lo hicieran y sólo se espera el final de un mandato para lanzar sus posturas, cuando ya es tarde para hacer ruido y pretender alcanzar los reflectores a costa del dolor de las familias que enfrentan momentos difíciles.
En el estado de Veracruz, en los últimos seis finales de mandatos estatales, el clima es el mismo de violencia, lo que indica que las estructuras no cambian y los políticos poco pueden hacer con un estado muy complicado para gobernar por su extenso territorio y por la elevada carga de intereses de grupos de poder de lucha partidista.
Ya es tiempo de apostar a la educación, al desarrollo del campo, al fomento del empleo y sobre todo a la gobernabilidad, sin sesgos y sin tintes políticos de siempre.
La apuesta en los próximos seis años de un nuevo gobierno es de que le vaya bien a Veracruz y se entienda que no todo en la vida son obras, cuando lo que la gente quiere es paz y seguridad, para de esa forma seguir en la lucha diaria.
En todo el país, la apuesta es a la pacificación y a una nueva época de legalidad, para acabar con impunidad y corrupción en los rubros que inciden en la vida en común.
Las nuevas generaciones de niños y jóvenes tienen sueños y anhelos, y aquí es donde se debe poner la atención parda darles un mejor ambiente y nivel de vida con las elementales posibilidades de acceder al estudio y se de la superación personal a base de un gran esfuerzo, y con las oportunidades laborales.
Los políticos que se esmeren en atender sus responsabilidades y que cumplan con sus labores, sobre todo en el terreno legislativo que se convierte aquí en el congreso veracruzano en una caja de grillos, incontrolable. Así las cosas.