
Raúl López Gómez/Cosmovisión
Al socialismo y comunismo, muchos lo contraponen entre propiedad privada y libertad.
Pero, en el caso de Cuba, el bloqueo de Estados Unidos en contra de la Isla Caribeña ha sido inhumano y resultado de la llamada guerra fría en donde la disputa real es en contra de Rusia, y los del imperialismo han decidido atacar con un férreo embargo despiadado de cerrar el paso por décadas a un pueblo que sufre las represalias al sistema de dominación, que tienen a toda una nación sufriendo escasez, pero que el orgullo y el ingenio del pueblo cubano es más grande que los intentos de control y sumisión del imperio en decadencia.
Por eso, es que la hermandad de México y Cuba, tiene que ver con la solidaridad humana y el criterio de voluntad de apoyar, sí de ayudar a los hermanos que por décadas han sufrido del acoso y el enfermo poder de un capitalismo ramplón y postrero que pasa la peor crisis económica y de valores humanos en un país en decadencia.
Y que, por cierto se culpa de lo mejor que han tenido en su historia de las personas migrantes que han ofrendado su vida por generaciones apoyando con mano de obra, experiencia y conocimiento a todo un país en que el gobierno paga con la peor moneda a los que les han dado su esfuerzo para apoyar el crecimiento de su economía.
En el caso mexicano de apoyo al pueblo cubano, hay que reconocer que la hermandad es parte de ese compromiso solidario con una nación que no sucumbe a la peor persecución en la historia de la humanidad con un bloqueo comercial que demuestre la falta de valores éticos y morales, además de que en EU, un gran sector de su población vive en las adicciones, el alcoholismo y el placer de una población que padece el hedonismo en un franco deterioro y ahora culpan de sus errores a los factores externos.
Estados unidos, pudo en algún momento ejercer un liderazgo humanitario en América, pero al optar por la guerra y la industria armamentista se ha visto la verdadera situación de un país que busca salir de su propia crisis existencial.
Ayudar a los hermanos de países del continente y de los que viven en la desgracia y de los propios que sufren es parte del compromiso de un humanismo cristiano.
Los que critican y condenan que una ayuda que es necesaria entre hermanos, lamentablemente están viviendo equivocados.
Cuba exporta al mundo talento con sus dones carismáticos de maestros, médicos y mucha cultura.
Además, la calidez y la alegría del pueblo cubano va por el mundo dejando huella de amor por la humanidad.
Ojalá y algún día se pueda liberar y superar el embargo criminal de EU al pueblo cubano, porque la crisis de los misiles y la invasión de Bahía de Cochinos ya es historia , hay que dar paso al perdón de unos y otros, el fin de odios y rencores, y los que provocaron el problema ya no viven.
Pedimos la Paz sobre la tierra y la hermandad entre unos y otros. Así sea.
Hay que organizar programas de ayuda humanitaria al pueblo cubano y ellos ayudan con médicos y maestros, con una vocación de servicio ejemplar. Hay que apoyar a los hermanos cubanos. Hay que enviar ayuda y evitarles el sufrimiento por un embargo despiadado e inhumano.
Que el Papa León XIV, ayude a resolver ese problema que por décadas nadie ha podido resolver.
Igualmente la Paz urgente en Gaza, que se logre pronto. Y el fin de la guerra entre Rusia y Ucrania. Hay mucho trabajo por hacer con urgencia.
Y que los dueños del dinero lo trasladen en ayuda humanitaria a quienes lo necesitan.
Le regalan un avión en Arabia Saudita al presidente Trump, es como para alimentar el “ego” al diablo. Orale.
Y en el Día del Maestro, la felicitación y el agradecimiento a todos los formadores que con rigor o no apoyaron en la guía y siguen en el compromiso de compartir tiempo y esfuerzo en la educación de las actuales y futuras generaciones. Simplemente gracias a todos.
Especialmente a los maestros y amigos en la vida. Un Faro de Luz, siempre: Heriberto Sánchez Vargas, Ignacio Morales Lechuga, Daniel Martí Sandria, Armando Gálvez Pérez Aragón, José Pablo Robles Martínez, José Manuel del Río Virgen, Ignacio Oropeza López, Francisco Blanco Calderón, Marco Malpica Rivera, Edelmira García Díaz, Luis Feijóo Herrera, Manuel Salinas Arellano, Avelino Muñiz García, Sergio Flores Armida, Rodolfo Molina Santiago, Adolfo Beauregard Tejeda, Antonio Cabañas Saldaña y Zócimo Castellanos Sobrevilla, siempre presentes. Andale. Así las cosas.