
Carlos Ramírez/Indicador político
Francisco, dejó las bases firmes, muy sólidas de una nueva evangelización de apego a Jesús como el centro de la iglesia Universal, por eso el nuevo Papa León XIV, además de ser latinoamericano por nacionalización que eligió ser peruano y de origen estadounidense Robert Francis Prevost de 69 años de edad, que habla perfectamente español, inglés, el italiano y latín además de los dialectos Quechuas andinos.
Cómo nunca antes, la humanidad cristiana y de todas las religiones celebran un acontecimiento trascendental por la llegada al papado de un hombre que igual que Francisco, durante su vida sacerdotal y de pastor ha dedicado muchos años a vivir en el Perú como sacerdote y obispo de Chiclayo.
Como el Papa 267 en la historia de la iglesia universal, la emoción del mundo cristiano lleno de júbilo, de alegría basta la más profunda emoción en que llega a dar un impulso por la paz, los pobres y la nueva evangelización iniciada por Francisco, por lo que históricamente su santidad León XIV, es un papa de continuidad de garantía para el mundo cristiano y el mundo en general.
“El Papa de la Esperanza”, de la orden de los Agustinos, agradeció a Francisco la guía por el nuevo rumbo de la iglesia Universal que va continuar por la justicia y los pobres para tender puentes por la Paz del Mundo y se encomendó a Jesús y la Virgen, para ejercer su labor episcopal de la iglesia con su carácter misionero para estar con los que sufren y necesitan a Dios como guía en sus vidas.
El Papa León XIV, emocionado contuvo las lágrimas y dio su primera bendición Urbi et Orbi al mundo cristiano, congregado en la Plaza de San Pedro en el Vaticano con una alegría, nunca vista de fe y de emoción apoteósica, con una cobertura mediática amplia y muy significativa. Andale. Así las cosas.