
Raúl López Gómez/Cosmovisión
La presidenta Claudia Sheinbaum, lucha en contra del tiradero heredado con todo y la división de los grupos políticos morenistas y sus aliados el partido verde y el partido del trabajo, más el desastre de los gobiernos del pasado que ocasionaron todo un cáncer a la administración pública con las malas prácticas corruptas.
Para quienes conocen el carácter de la doctora Claudia Sheinbaum, saben que es directa y firme en sus convicciones, pero eso no lo parecen aceptar o entender los operadores en el senado y la cámara de diputados, que no cumplen a cabalidad con la mística de legalidad que establece en su gobierno la presidenta del país.
El reflejo de lo que está sucediendo en la política mexicana, es el predominio de la misoginia recalcitrante y peligrosa a lo que se enfrenta la presidenta Claudia Sheinbaum, y que además evidencia que los grupos de poder de su partido y de la propia dirigencia nacional de Morena con Luisa María Alcalde Luján, sale al paso de quienes se resisten a cumplir con el ritmo, sí el movimiento que le da a su mandato en la analogía como una directora de orquesta, y los músicos no respetan “el tempo”: vivace, vivo y rápido en forma evidente.
Pero, lo importante es que la presidenta Claudia Sheinbaum, con una inteligencia de mujer súper dotada y una capacidad intelectual evidente, que conjunta con una gran sensibilidad humana y que desde niña y en su juventud se le ha visto la sensibilidad por el arte musical y sobre todo de la participación en grupos artísticos en donde se requiere disciplina y orden.
Y los analistas dicen, que la presidenta Sheinbaum, tiene luz propia y que los satélites del pasado le andan haciendo sombra, hasta que les meta orden, pero todo a su momento.
Por cierto, el diputado federal, Alfonso Ramírez Cuéllar, es de los personajes más cercanos a la presidenta Claudia Sheinbaum y estará este viernes a las diez horas en Xalapa en la sede del Sindicato del IMSS para ofrecer una conferencia a la prensa veracruzana. Andale. Así las cosas.