Por inundaciones, reubican a comerciantes en Minatitlán
POZA RICA, Ver., 7 de mayo de 2017.- Tras 40 años de pertenecer a las filas del Partido Revolucionario Institucional (PRI), la dirigente de colonias, Gloria Torres Ordaz, anunció su salida de la institución política, así como también de sus correligionarios, tras el desaire que sufrieron el pasado fin de semana durante la visita del candidato a la Presidencia, José Antonio Meade Kuribeña.
Recordó que a su paso por Poza Rica, el candidato de la alianza Todos por México sólo se reunió con trabajadores del sector petrolero, y no con las representaciones populares, como los líderes de colonias de esta ciudad.
“Es una reacción de desencanto, de desilusión, porque a nosotros que, formábamos parte de la estructura de la campaña, nos hicieron a un lado. No vino el candidato a los que estamos trabajando en la militancia de Poza Rica”, comentó.
Dijo que el municipio es importante electoralmente, no sólo por un sector, sino por sus colonias, sus mujeres, y sus jóvenes, sin embargo “no tomaron en cuenta a la estructura, al pueblo de Poza Rica, nada más se hizo para un grupo privado, cosa que no debería de ser, porque es una campaña política, yo no sé si los petroleros vayan a ganar esta elección, o si lo maestros tengan todo para ganar”.
Señaló que en las campañas priistas siempre han participado los representantes de sectores y organizaciones, quienes en esta ocasión fueron ignorados de manera definitiva, cerrando el evento sólo para algunas secciones de petroleras del norte del estado.
Lamentó el trato que se le dio a los militantes de su partido político, y que se esté depositando la confianza en un solo sector, pues al manos del sector petrolero han estado las últimas contiendas electorales priistas, con lamentables resultados.
“También está secuestrado por un grupo que ni presencia tiene, te hablo de la CNOP, donde no hay presencia de nadie, donde juntos no hemos hecho nada, por lo mismo, porque se cierra un grupo”.
La dirigente anunció que será este martes cuando se lleve a cabo una marcha hacia el partido, en donde tanto ella como sus correligionarios presentarán sus renuncias, después de que se demostró que hay priistas de primera y de segunda, pero no definió si apoyarán a otro candidato de distinto partido político.