
Ofrecen capacitación jurídica gratuita a policías del puerto
COATZACOALCOS, Ver., 20 de agosto de 2025.- A unos días de que iniciara el brote de diarrea y vómito en el municipio de Tatahuicapan de Juárez, persiste el escepticismo entre los pobladores.
Aunque en un principio se dijo de manera extraoficial que pudiera tratarse de cólera, una vez que llegaron a la cabecera municipal las autoridades de salud, se aclaró que aparentemente lo que estaba causando estragos era la presencia de la bacteria e- coli en algunos cuerpos de agua.
Ante esta situación, el gobierno de Veracruz reforzó las acciones en Tatahuicapan e implementó un cerco sanitario preventivo.
Asimismo, implementó varias acciones de vigilancia por enfermedades diarreicas agudas en la región sur, así como llevó a cabo un censo sanitario y la revisión de mercados.
Por otro lado, se hizo el mantenimiento al agua potable y se desarrolló la atención médica inmediata, de manera responsable en la parte de salud preventiva de las familias.
Sin embargo, las autoridades locales rechazaron puntualmente que esta situación se origine por la contaminación del agua, incluso destacaron que han hecho un gran esfuerzo al realizar la cloración de los 3 tanques de agua potable que abastecen a Tatahuicapan.
Cabe recordar que en la administración estatal anterior el municipio tuvo un conflicto con Coatzacoalcos por el tema de la construcción de un tanque de agua, que finalmente se concluyó en esta administración.
Las calles lucen con la movilidad acostumbrada y un grupo de jornaleros agrícolas espera sentado en el boulevard de la población en espera del autobús que los llevará a trabajar al estado de Sinaloa; nadie se anima a hablar del tema, pero es obvio que sienten temor por lo que está pasando o por lo menos se encuentran escépticos.
Este miércoles, no se hallaba el presidente municipal, Eusebio González Hernández, en su oficina, pues al parecer había salido a hacer un recorrido a algunas comunidades, pues es un edil de territorio.
Un gran porcentaje de la población vive de la agricultura y la ganadería, y otra cantidad importante emigra todo el año a laborar como jornaleros agrícolas a estados como Sinaloa, Sonora, Jalisco y Baja California, a donde se desplazan a los campos de cultivo de tomate, pepino, chile, entre otros.
Mientras tanto continúa el escepticismo y las autoridades competentes no han dado a conocer de manera clara el resultado oficial que confirme o descarte por completo que el problema proviene de agua contaminada, y sigue la vigilancia epidemiológica y en purificadoras y depósitos caseros de agua.