La despolitización del pueblo y sus nefastas consecuencias
Pobreza: razones al desnudo
Los resultados de la Medición de Pobreza Municipal correspondiente al periodo 2010- 2015, dados a conocer ayer por el Coneval, arrojan verdades contundentes, éxitos, realidades indignantes y una lección política
Vamos por las verdades inapelables: los municipios que concentran el mayor número de pobres, todos por encima del 90 por ciento de la población, se encuentran en dos entidades donde el estado de derecho es débil, hay alto grado de ideologización, y opera la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Se trata de Oaxaca y Chiapas. Dos estados donde la CNTE ha combatido el desarrollo de la empresa privada, obstaculiza los cambios en la educación, y recurre a la violencia para solucionar sus problemas sin que el Estado tenga margen para hacer valer las leyes.
De los 15 municipios con mayor porcentaje de población en condición de pobreza, 14 están en Oaxaca y Chiapas (el otro en Guerrero).
En esos estados hay una lucha permanente de la Coordinadora en contra de proyectos productivos, del establecimiento de nuevas fuentes de empleo, aplicación de reformas a la educación, boicot a las a las empresas (quema de transportes, cierre de carreteras, toma de hoteles y estaciones de radio, estrangulamiento del comercio por plantones y bloqueos), y radicalismo ideológico que se expresa en batallas campales contra la autoridad y marchas que le dicen a la niñez que “maestro luchando, también está enseñando”.
Desde luego que la pobreza en esas entidades existe desde antes de la CNTE, pero la diferencia está en que mientras otros municipios, muchísimos, reducen la pobreza, en esos estados se ahonda y rebasa el 90 por ciento de la población.
Y tienen casi de todo para salir adelante: gente laboriosa, sentido artístico, potencial en turismo y ganas de trabajar. Pero en sentido inverso opera una ideología “anticapitalista” del grupo dominante (la CNTE) que hace valer su ley… por encima de la ley. Y no hay Estado capaz de actuar contra decenas de miles de maestros movilizados para cerrar carreteras, aeropuertos y estrangular una ciudad.
También hay éxitos reflejados en esta medición 2010-2015. En ese periodo la pobreza extrema se redujo en casi mil municipios del país (989), y sólo se aumentó en 162. Hay avance. Ahí están los números.
Sin embargo, la reducción de la pobreza en general disminuyó en 699 municipios y aumentó en 422.
El margen para el optimismo es muy escaso y nos muestra que la política social ayuda a disminuir la pobreza extrema, pero la pobreza en general sólo se abate con mayor crecimiento económico y no lo henos tenido.
La gran tarea para el próximo sexenio será el crecimiento de la economía. Sólo así se podrá sacar de manera permanente a más personas de la pobreza, y no a cuentagotas como hasta ahora.
Finalmente salta a la vista lo irritante, luego de ver los datos de el Coneval: el municipio con mayor número de pobres en el país es Ecatepec.
Claro, es el más poblado, de podrá decir y es cierto. Pero en 2010 no era el que tenía mayor número de pobres (era Puebla), y ahora se colgó esa triste medalla. Algo hicieron muy mal en el Estado de México después de esa fecha para llevar a Ecatepec al peor sitio nacional de la pobreza.
No sólo es eso. Ecatepec es el municipio donde -según el INEGI- se percibe la mayor inseguridad de todo México: 95 por ciento de sus habitantes sale con miedo a la calle,
El municipio más poblado del país es el más inseguro y con mayor número de pobres.
Las repercusiones políticas van a ser obvias: el gobernador del Edomex que entregó esas cuentas, Eruviel Ávila, está al frente del PRI en la Ciudad de México.
Tal vez no fue su culpa, o sí, pero cuando pida el voto para Mikel Arriola los capitalinos se preguntarán si van a convertir a la Ciudad de México en un segundo Ecatepec.