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XALAPA, Ver., 1 de septiembre de 2016.- De los 15 compromisos que hizo Enrique Peña Nieto a los veracruzanos cuando buscaba la Presidencia, la mayoría fueron obras en materia de comunicaciones y transportes que implicaban más de 18 mil 500 millones de pesos en inversión para beneficio de miles de habitantes de más de 30 municipios; a 4 años de gobierno, las obras ni siquiera se han empezado, o llevan menos de 5 por ciento de avance. “Ocurrencias” sin soporte técnico-financiero y social, afirma el exdelegado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Agustín Basilio de la Vega.
El exfuncionario federal dijo que las obras que propuso y que firmó ante notario “son locuras, imposibles de realizar, no tienen sustento técnico ni social ni económico, son ocurrencias… se tiene que retomar el paso de que sean comisiones técnicas las que revisen el presupuesto, y las que revisen las propuestas de la SCT, que tiene técnicos muy capaces, que podrían hacer mucho más si no se inmiscuyeran los criterios políticos y de negocio de tipo particular”, señaló.
Dijo que del IV Informe de Gobierno de Enrique Peña Nieto en materia de comunicaciones y transportes sólo puede hacerse un balance pobre para Veracruz, ya que no se han logrado aterrizar los recursos para hacer las obras que demanda el estado.
“No se ha inaugurado ninguna autopista, ninguna carretera importante, lamento que hayan sacado o hayan presumido haber hecho la autopista México-Tuxpan, cuando en realidad solamente la concluyeron, quizá estaba pendiente cuando mucho un kilómetro de varios cientos que implica esa magna obra, y que se le debe al presidente Felipe Calderón, llegaron prácticamente a pintar la raya de color amarillo y algunas cuantas cosas, y con eso dijeron que estaban dándole a Veracruz una gran obra.
LAS OBRAS PROMETIDAS QUE NI SIQUIERA HAN EMPEZADO
En el marco del IV Informe de Gobierno de Enrique Peña Nieto, Quadratín Veracruz realizó un balance del avance que llevan las obras que prometió el mandatario para la entidad y que firmó ante notario, en total son 9 megaobras de infraestructura en las que se invertirían un total de 18 mil 500 millones de pesos, y de las cuales 5 no han empezado o llevan menos de 8 por ciento de avance.
“Van a un ritmo sumamente lento por los recursos, los recortes han afectado fuertemente el desempeño del gobierno federal, que tiene cuadros magníficos de técnicos, ingenieros, que están prácticamente desaprovechados, y de los ejes troncales, tampoco se ve la obra”, señaló Basilio de la Vega.
Las obras detenidas son:
Compromiso 60: Primera etapa del Periférico de Orizaba para facilitar la comunicación entre las ciudades de Córdoba y Orizaba, con una inversión de 5 mil millones de pesos, una obra inútil ya que de acuerdo con Peña Nieto, esta obra agilizaría el tránsito entre Orizaba y Córdoba, aunque ambas ciudades están conectadas por una autopista, con caseta de cobro, y la carretera federal, en condiciones aceptables y con circulación fluida.
“Háganme de esta tierra, siéntanme suyo, adopten este proyecto para que juntos llevemos a México a mejores condiciones”, expresó el 16 de mayo de 2012, cuando firmó ante notario que cumpliría.
De acuerdo con la información a la que obtuvo Quadratín, por medio de la SCT, la obra ni siquiera ha terminado de planearse ya que afectará áreas naturales protegidas y a cientos de campesinos de comunidades de 11 municipios de la zona centro. El financiamiento, de realizarse la obra, sería público privado al 50-50,
Compromiso 159: Construir el libramiento ferroviario de Coatzacoalcos, con una inversión de 2 mil 500 millones de pesos, obra que lleva cero por ciento de avance, y que Peña Nieto firmó el 15 de junio de 2012.
Esta obra, con una longitud aproximada de 42 km en los municipios de Oteapan, Cosoleacaque, Zaragoza, Ixhuatlán del Suerste y Nanchital, ya no se hará. La SCT consideró que el presupuesto presentado por la asociación finalista rebasó el elaborado de manera previa y concluyó que no sería factible pagarlo, por lo que resolvió declarar desierta la Licitación Pública Nacional LO-009000988-N10-2013.
Así que a fin de aliviar la conexión ferroviaria entre el puerto de Coatzacoalcos y la zona industrial, la SCT determinó evaluar la factibilidad de un libramiento, un trazo alterno más competitivo en distancia y tiempo, que permita ofrecer ventajas sobre el trazo ferroviario actual, lo que hasta la fecha sigue sin hacerse.
Compromiso 222: Modernizar el Aeropuerto El Lencero, en la capital de Veracruz, con una inversión de 117 millones de pesos, esta obra contemplaría el reacondicionamiento de pista, calles de rodaje, plataformas y hangares; rehabilitación de camino de acceso actual y construcción del nuevo camino; rehabilitación del estacionamiento actual y ampliación del mismo; remodelación del edificio terminal actual y su ampliación; mantenimiento y equipamiento de Torre de Control; remodelación del edificio del SEI y construcción de cubierta y cárcamo en estación de combustibles; instalación de ayudas visuales y la sustitución del llamado “VOR” existente.
Sin embargo, a 4 años, no se ha hecho ninguna de estas acciones, es más, el proyecto sigue en planeación, aunque ya fue licitada y la empresa que ganó fue Senermex Ingeniería y Sistemas. De acuerdo con el semáforo de obra de la SCT, se sigue contemplado iniciar dentro de 15 días, el próximo 14 de septiembre, aunque en una visita al aeropuerto, no hay ni material, ni maquinaria, ni parece que vaya a iniciarse pronto esta obra.
Compromiso 22: Construcción de la primera etapa de la carretera Cardel-Poza Rica interconexión La Mancha-Tihuatlán (129km), con una inversión de 3 mil 470 millones de pesos, que lleva un avance real de 4 por ciento, y fue firmada ante notario público por Peña Nieto el 14 de abril de 2012.
De acuerdo al semáforo de obra pública de la SCT, el proyecto se encuentra concluido, la contratación lleva apenas 34 por ciento y la mayor parte de la financiación será privada; quienes obtuvieron la concesión fueron Grupo Promotor de Desarrollo e Infraestructura, Mota-Engil México, Mota-Engenharia e Construccao y TMEP Latinoamérica.
Compromiso 23: Construcción de la autopista Tuxpan-Tampico con una inversión de 4 mil 977 millones de pesos, y que lleva un avance real de 8 por ciento, firmada ante notario el 14 de abril de 2012. Esta obra será construida por Desarrollo y Recuperaciones Urbanas, Grupo Promotor de Desarrollo e Infraestructura, Promotora de Edificaciones y Constructora del Centro y Mota-Engil México.
LAS BRAS QUE PODRÍAN TERMINARSE
De los compromisos presidenciales que están en marcha y llevan entre 30 y 60 por ciento de avance sólo se encuentran dos.
Compromiso 161: Modernizar la Carretera Federal 180 en los tramos Santiago Tuxtla-Catemaco y Cosoleacaque-Jaltipan-Acayucan, con una inversión de mil 500 millones de pesos, y que lleva un avance de 36 por ciento, firmado ante notario el 22 de junio de 2012.
Esta es de las pocas obras que se están trabajando y llevan más de 10 por ciento de avance, y está a cargo de Infraestructura y Desarrollo Integral DICSSA, Construcpue de México, ALFA Proveedores y Contratistas y COPISA Infraestructuras México. Y pese a que lleva menos de la mitad, la SCT tiene planeado concluir esta obra el 31 de diciembre de 2016.
Compromiso 219: Construir el Boulevard Boca del Río-Antón Lizardo, con una inversión de 400 millones, es la única que lleva más de la mitad, con 66 por ciento de avance, y se tiene contemplado terminarla el próximo 30 de septiembre, pero sin fecha de entrega.
SÓLO 2 OBRAS “MAL CONCLUIDAS”
De los 9 compromisos presidenciales que firmó Peña Nieto, sólo dos han sido concluidos pero con irregularidades, como el compromiso 220: Construir caminos intermunicipales de 24 municipios que se encuentran en las faldas del Pico de Orizaba, con una inversión de 400 millones de pesos, firmado ante notario el 16 de mayo de 2012.
De acuerdo con el Análisis de Información del Balance General de obras 2013-2018 de la SCT publicado en julio de este año, la obra fue ya fue concluida, no obstante, a pesar de lo que afirma el documento, ni el Presidente, ni alcaldes o el gobernador Javier Duarte han inaugurado la obra, es más, ni siquiera se ha informado que esta obra ya fue concluida, y no aparece en el semáforo de obra pública de la dependencia federal.
Respecto del compromiso 221, la construcción del libramiento de Coatepec, donde se invirtieron 135 millones de pesos, la cosa es más grave: Peña Nieto inauguró una obra que no sirve, que vendió como terminada, cuando realmente es sólo la primera etapa y no cumple para nada con su función.
“De los compromisos que ha entregado han sido mal cumplidos, por ejemplo, el libramiento de Coatepec, no lo concluyeron, hicieron la primera etapa, debió haber sido integral, hasta llegar al entronque Zimpizahua y después a la carretera Xico-Teocelo, lo dieron por terminado y ni siquiera es un libramiento, es parte de un libramiento que no está contribuyendo a mejorar la vialidad para la ciudad de Coatepec, y no cumple su auténtica función: todos los vehículos que vienen de Xico y Teocelo siguen pasando por Coatepec”, afirmó Agustín Basilio de la Vega.
El exfuncionario federal afirmó que han engañado al presidente, “o él no ha contado con los técnicos, o los reemplazos que hubo en la SCT no han logrado dar una buena asesoría. Esos compromisos cumplidos son muy cuestionables”, sentenció.
OBRAS, SIN RIGOR TÉCNICO-CIENTÍFICO
Cuestionado si no hubo ningún tipo de estudio técnico para determinar las obras que prometió Peña Nieto para Veracruz, señaló que si bien hubo criterios técnicos para hacerlas, no tuvieron rigor científico.
“El puerto de Veracruz, por ejemplo, claro que tiene un sustento técnico y es una obra que debe que hacerse y es en donde deberían enfocarse las mayores baterías, la construcción del eje troncal Veracruz-Monterrey también es estratégico y deberían de apoyarse más esos proyectos, sin embargo hay otros, que me parece que no tienen el rigor técnico-científico para poderse realizarse”.
Finalmente, señaló que si la Cámara de Diputados logra hacer que trabaje la Comisión Técnica de la Región Sur Sureste, se evalúan los proyectos y se revisan cuáles realmente cumplen con las condiciones de costo-beneficio social que marca la ley, cuáles tienen registro ante Hacienda, cuáles tienen derecho de vía, y se hace una priorización conforme a las necesidades económicas y los avances técnicos de cada proyecto, “se podría retomar el camino, pero si siguen influyendo funcionarios de alto nivel que no tienen idea de la ingeniería, que no tienen perfil técnico y que se dejan llevar por ocurrencias, sin planeación, no es posible ni siquiera sentar las bases para un desarrollo sustentable”, concluyó.