Realiza CAEV desasolve y limpieza en municipios dañados por lluvias
XALAPA, Ver., 30 de junio de 2016.- Afuera del Congreso de Veracruz hay una fiesta, ésas a las que nos tienen acostumbrados los 400 Pueblos, bailando, saltando, gritando, desde el sonidito hasta una gran variedad de chunchacas, salsas y cumbias.
Hacen una rueda frente al recinto legislativo, donde montaron escenario y bocinas, baila una, baila otra. Antes, el hijo del líder, el diputado Marco Antonio del Ángel hizo un pronunciamiento: “Nos provocaron, pero no tenemos miedo, qué nos hace Miguel Ángel Yunes, nosotros ya estuvimos en la cárcel y vamos a resistir su gobierno de dos años”.
El desayuno llegó temprano para los integrantes de la agrupación, los vecinos de los alrededores están a la expectativa, no saben si se repetirán los hechos de este miércoles, cuando los 400 Pueblos agredieron con palos, botellas, piedras y hasta orines al gobernador electo, Miguel Ángel Yunes Linares, al líder nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya, y a quien compitió con Felipe Calderón para la candidatura presidencial panista, Santiago Creel, así como a simpatizantes del albiazul y personal de seguridad.
«’Pus’ ya no sabemos, siempre hay mitote y con esos de los 400 uno nunca sabe, están locos, se encueran en la calle», dice doña María, que todos los días, desde hace años, se sienta en las mañanas a contemplar la calle, vive a un par de cuadras del Congreso, no habla mucho, se niega a la entrevista y a la foto, pero dice, antes de guardar silencio y beber su café, «si le contara todo lo que ha pasado en esta calle…», entonces se pone a recordar, volteando la mirada y bebiendo su café.
Son las 8:10 de la mañana
Policías formaron un cerco de seguridad a dos cuadras a la redonda, vallas se extienden alrededor del inmueble, no hay tantos elementos como se había anunciado, no llegan a 50, de los mil que trascendió estarían custodiando el Congreso.
A las 9:00, Marco Antonio del Ángel se para frente a la multitud de campesinos, “nos provocaron”, “qué tenía que venir a hacer aquí quien nos metió a la cárcel”, “nos reorganizaremos y resistiremos el gobierno de dos años”, “no podrán con nosotros”, “queremos un Fiscal Anticorrupción ya, ya, ya”.
Aplausos, gritos frenéticos, puños alzados
Adentro, en el Salón del Pleno, está colmado de panistas, perredistas y muchos acarreados priistas, incluso se pueden ver caras conocidas de quienes siempre asisten a los eventos del Revolucionario Institucional.
Al fondo, divertidos, chacoteros, un grupo ríe a carcajadas y de pronto se escuchan las Mañanitas, alguien cumplió años. Presentes, algunos diputados electos como la panista Maryjose Gamboa y el perredista Sergio Rodríguez.
Hay una tensa calma, “no todo está planchado”, se escucha decir entre algunos asistentes. Mucho está en juego, es un día decisivo: se aprobará al nuevo titular de la Fiscalía Anticorrupción, y no quieren que se repita lo del Congreso de Quintana Roo, donde al votar al nuevo Fiscal, ciudadanos tomaron el pleno y reventaron la sesión.
El ambiente está enrarecido, huele a sudor, pero también se siente el nerviosismo, muchos se toman la selfie en el recinto, saben que hoy es un día importante.