
Carlos Ramírez/Indicador político
· El gobierno suspende servicios por falta de recursos
· Cierran consulados porque no cubren… ¡ni salarios!
· Quién administra Migración: ¿Garduño o Salomón?
Se veía venir.
No hay recursos para mantener muchos servicios públicos y el problema comienza a pasar factura al gobierno federal.
Aquí hemos dado adelantos.
Primero hablamos de las dificultades de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) de Omar García Harfuch.
El país lleno de fosas y ahorcan a García Harfuch, titulamos la columna del 21 de marzo cuando informamos de esa falta de dinero.
La cruzada contra mayitos y chapitos había salido muy cotosa y fue necesario derivar partidas para contener la violencia en la tierra no gobernada por Rubén Rocha Moya.
Obligado, pidió diez mil millones de pesos y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP de Rogelio Ramírez de la O/Edgar Amador Zamora) atendieron la emergencia con mil millones provisionales.
Pero cuando llegaron, la SSPC ya había gastado cinco mil y ahora requiere muchos más de los diez mil para continuar con su operación ordinaria… y en eso están.
NI PARA VIÁTICOS
Otro ejemplo se da en materia migratoria.
El 3 de abril titulamos la columna Trump deporta y los consulados mexicanos sin dinero para defender, pues carecen de lo necesario para su funcionamiento.
El tema ha explotado, al grado de originar paros en varios consulados -Sacramento y Nogales son dos ejemplos, aunque otros lo han hecho con menos efecto mediático- para exigir… ¡pago de salarios!
Mucha gente no lo sabe, pero el problema se extiende inclusive a embajadores y agregados, quienes deben pagar con sus tarjetas de crédito visitas a legaciones para atender emergencias y contactar a paisanos.
Así pagan viáticos, comidas, alquiler de autos, boletos de avión… y hasta papelería y aportaciones a migrantes mexicanos en riesgo de ser deportados por la dura política de Donald Trump.
Hablamos de Estados Unidos, pero esta situación también se sufre en otros lugares, incluidos países europeos y asiáticos.
INM SIN CLARIDAD
Tampoco hay recursos vastos para deportados.
En este caso con un inconveniente adicional: el comisionado Francisco Garduño no se distingue por su eficiencia mientras su designado sucesor y ahora funcionario menor, Sergio Salomón, no sabe cuándo aquél perderá la protección de ya saben quién y cuál será su futuro.
Mientras el ex gobernador de Puebla recorre estaciones, revisa situaciones específicas, dialoga con funcionarios locales y espera instrucciones sobre cómo resolver saturaciones, repatriaciones, entrega de documentos temporales, alimentación y otras necesidades.
De poco sirve si se topa con la inacción de Francisco Garduño, cuya única lealtad es para Andrés Manuel López Obrador dese cuando lo integró al gabinete capitalino en el período 200-2006.
También se da otro fenómeno:
Si históricamente el gasto diplomático se prevé año con año, ¿por qué Rogelio Ramírez de la O no previó estas partidas a sabiendas del triunfo de Donald Trump y la exigencia de más gasto?
Ante esta situación es un alivio el incremento en los ingresos fiscales del primer trimestre del años -19.7 por ciento-, según informó la presidenta Claudia Sheinbaum el 4 de abril.
Este porcentaje se traduce en más de un billón 717 mil millones de pesos, aunque para disponer de ellos deben cubrirse una serie de condicionamientos de la ley y de la administración pública.
Como sucede con Omar García Harfuch y su SSPC.