Teresa Gil/Libros de ayer y hoy
El ideal bolivariano, retomado por Hugo Chávez, frente al árbol simbólico de Venezuela, el Samán de Gûere, hace más de 30 años, es un principio de unidad latinoamericana que hoy, con un obsesivo Nicolás Maduro presentándose como un absurdo dictador disfrazado de “presidente electo”, parece estar perdido en sus móviles originales.
Y a esa proclama, al parecer quisiera estar unido, envuelto en una ciega fascinación, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador.
Afortunadamente no lo ha hecho, cuando menos explícitamente.
Los actuales líderes de los países más influyentes en América Latina, en una significativa mayoría, exigen trasparentar las elecciones realizadas el pasado domingo en Venezuela.
Ayer mismo, los Estados Unidos emitieron una declaración en la que asegura que Edmundo González Urrutia ganó a Nicolás Maduro por un cálculo de 2 a 1.
No hay pues, una lucha de principios en los momentos actuales de latino américa, sino una disputa electorera que, lamentablemente ha dejado ya tres muertos y una encarcelación masiva a los opositores a Maduro.
El mimo Maduro llegó a rememorar en pasada ocasión lo siguiente:
“Recordamos aquel momento histórico en el que Hugo Chávez, junto a un grupo de oficiales y suboficiales juraron en el Samán de Güere y por Bolívar, liberar para siempre al pueblo venezolano. Acto patriótico que inició el camino glorioso de la Revolución Bolivariana”, escribió el Jefe de Estado en @NicolasMaduro.
Con este juramento inspirado en el Libertador Simón Bolívar, el comandante Hugo Chávez, y un grupo de oficiales y suboficiales patriotas juraron romper las cadenas que sometían al pueblo venezolano de la miseria y la pobreza.
“Juro por el Dios de mis padres, juro por mi patria, juro por mi honor que no daré tranquilidad a mi alma ni descanso a mi brazo hasta no ver rotas las cadenas que oprimen a mi pueblo por voluntad de los poderosos. Elección popular, tierras y hombres libres, horror a la oligarquía”, fueron las palabras de juramento expresadas por los patriotas.
Dicho compromiso está basado en el juramento que realizó el Libertador Simón Bolívar en el Monte Sacro.”
De esa motivación social y democrática, hoy no queda nada en Venezuela.
México debe ser consecuente con el sentir internacional acerca de la incuestionable crisis social en la que la obsesión de Maduro tiene sumida a Venezuela.
Esperamos que la tradición de política exterior mexicana, se mantenga dentro de los principios de la Doctrina Estrada.
EN TIEMPO REAL.
1.- Con gran habilidad mediática la virtual presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, sigue administrando la presentación de los que serán sus funcionarios a partir del 1 de octubre próximo. Arturo Zaldívar, Leticia Ramírez y su permanente y eficaz secretario particular, Carlos Morales, son los nombres que serán integrantes del gabinete ampliado.
2.- Lo más probable es que sea entre jueves o viernes de la próxima semana cuando el tribunal federal electoral declare la validez de las elecciones presidenciales de junio pasado y con ello declarar formalmente presidenta electa a Claudia Sheinbaum. Será una decisión que fortalecerá aún más a la ganadora de los comicios del pasado junio.
3.- En los días previos a la toma de posesión como presidenta de México de Claudia Sheinbaum, el dirigente obrero de la CATEM, Pedro Haces, emitirá el posicionamiento de su organización con respecto a la forma en que apoyarán el proyecto de política laboral de la inminente mandataria mexicana.