
Carlos Ramírez/Indicador político
Entre las propuestas más destacadas presentadas por los candidatos presidenciales durante el segundo debate está el tema del empleo, que es uno de los problemas más graves que ha padecido la población en todos los sectores productivos, tanto en las ciudades como en el campo.
Aun cuando en este sexenio se ha incrementado considerablemente el salario mínimo como nunca, esto no ha sido suficiente, toda vez que las empresas se han visto obligadas a aumentar los salarios de sus empleados, pero por otro lado han tenido que reducir su planta laboral, para no tener que cerrar sus fuentes de empleo.
Cada candidato tiene su propia estrategia para mejorar la oferta laboral, y en algunos aspectos tienen coincidencias, puesto que los tres buscan mejorar las condiciones laborales en todo el territorio nacional y en todos los sectores, así como la seguridad social y la reducción de la jornada, la igualdad salarial entre mujeres y hombres, aspecto que ya se encuentra contemplado en la legislación laboral vigente. Los tres coincidieron en buscar cerrar la brecha salarial y aprovechar las ventajas del nearshoring.
Los planteamientos sobre el empleo y los derechos laborales presentados por los tres candidatos son los siguientes:
XÓCHITL GÁLVEZ RUÍZ
La propuesta más destacada de Xóchitl Gálvez en materia laboral es la exención de pago de impuestos a los trabajadores que ganen menos de 15 mil pesos mensuales, beneficiando a alrededor de 20 millones de empleados.
CLAUDIA SHEINBAUM PARDO
Lo más destacado en materia laboral presentado por Claudia Sheinbaum es el proyecto de construcción de 10 polos de Bienestar o parques industriales, aprovechando las inversiones generadas por el nearshoring.
JORGE ÁLVAREZ MÁYNEZ
La propuesta más destacada de Jorge Máynez en materia laboral es el incremento del salario mínimo a 10 mil pesos mensuales.
Los tres aspirantes a la presidencia de la República coinciden en que uno de los más graves problemas de México es la falta de oportunidades laborales, especialmente los puestos de calidad, toda vez que muchos trabajadores se enfrentan a bajos salarios y condiciones de trabajo precarias, sin seguridad social ni prestaciones. Los jóvenes recién egresados de los tecnológicos o universidades no encuentran empleos bien remunerados y tienen que emigrar hacia otros países, por lo que se requieren políticas públicas efectivas que fomenten la creación de empleos formales de calidad en las distintas regiones del territorio nacional.