Carlos Ramírez/Indicador político
El atasco que se ha generado en el Canal de Panamá por culpa de la sequía podría beneficiar económicamente a los puertos de Coatzacoalcos y Salina Cruz, toda vez que el congestionamiento no tiene para cuando liberarse, por la falta de agua que ha afectado el funcionamiento de las esclusas.
El legendario Canal de Panamá que comunica a los dos océanos, Atlántico y Pacífico, está saturado por causa de la fuerte sequía, lo que ha generado falta de agua y ha provocado un congestionamiento de 134 buques de gran calado que esperan poder cruzar el canal. Es decir, el doble del número de barcos que normalmente cruzan por este famoso canal, entre estos hay barcos graneleros (con carbón o mineral de hierro) y gaseros, además de todo tipo de carga como portacontenedores, buques refrigerados con frutas y porta vehículos. De manera que este congestionamiento ha provocado una demora de entre 9 y 11 días para lo que llaman tránsitos no reservados.
El lento funcionamiento de las esclusas causado por la falta de agua limita a 32 de un máximo de 38 el número de buques que cruzan por día este canal. Esta disposición estará vigente hasta nuevo aviso, lo que significa que las compañías navieras y de comercio internacional tendrán que buscar otras alternativas para mover sus productos de un océano al otro, hasta que se regularice el calado que ahora está en 44 pies debiendo ser de 50. Esto obliga a los buques a disminuir su carga para poder cruzar.
Las más afectadas son las embarcaciones que no cuentan con reserva, por lo que tienen que andar buscando una reserva, lo cual eleva sus costos, ya que han pagado hasta 700 mil dólares para ganar una subasta más el peaje que tienen que pagar para usar el canal.
Según los expertos estos problemas de abastecimiento de agua se han vuelto cíclicos y podrían empeorar según se comporte la sequía y la llegada del fenómeno del Niño, por lo que se tienen que buscar otras alternativas para cruzar los productos, lo que podría ser el detonante que haga viable el Corredor Interoceánico que está por concluirse en el Istmo de Tehuantepec.
EL COLAPSO DEL CANAL Y SUS EFECTOS
Un colapso en el Canal de Panamá sería un evento significativo con amplias implicaciones económicas, logísticas, geopolítica y ambientales a nivel global. Por lo que se deben tomar medidas extremas y rigurosas para mantener y garantizar la operación segura del canal.
• Impacto en el comercio internacional: el Canal de Panamá es una ruta principal para el transporte de mercancías entre Asia y la costa este de los Estados Unidos, así como entre Europa y la costa oeste de América del Sur. De manera que un colapso interrumpiría estas rutas, lo que podría llevar a retrasos masivos en la entrega de bienes y aumentarían los costos, lo que podría generar también escasez de productos.
• Cambios en las rutas de navegación: los barcos tendrían que utilizar rutas alternativas como Cabo de Hornos en el sur de América del Sur, lo que significa un viaje más largo y peligroso, lo que aumentaría costos de transporte y tiempo.
• Impacto económico en Panamá: la economía de Panamá depende en gran medida de los ingresos que genera el Canal, por lo que un colapso en su operación tendría un impacto devastador en la economía panameña.
• Reevaluación de la infraestructura marítima: un colapso del Canal de Panamá podría llevar a una reevaluación de la infraestructura marítima global y al desarrollo de rutas alternas, expansión de otros canales, mejora de puertos e inversión en ferrocarriles y carreteras para llevar las mercancías.
• Impacto geopolítico: la interrupción del funcionamiento del Canal podría tener ramificaciones geopolíticas, toda vez que diferentes países podrían competir por influencia en la región o tratar de asegurar rutas de transporte alternativas.
• Impacto ambiental: el colapso del Canal de Panamá podría tener efectos ambientales, como la alteración de los ecosistemas locales y la necesidad de limpiar y reparar cualquier daño causado por el mismo colapso.
De manera que de suceder este gran colapso y de que este atasco se alargue, el gran beneficiario sería el tan esperado Corredor Interoceánico, lo que vendría a detonar la economía tanto de Coatzacoalcos como de toda la región del Istmo de Tehuantepec. Esperemos que así sea.