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XALAPA, Ver., 14 de 2017.- Este fin de semana entraron en vigor los lineamientos de lenguaje incluyente, no sexista y no discriminatorio, que se disponen para el Organismo Público Local Electoral (OPLE) en la Gaceta Oficial del Estado en su número extraordinario 190 publicado el 12 de mayo.
En dicha publicación se determina que estas disposiciones tienen que ser aplicadas en cualquier tipo de comunicación dentro del organismo electoral, ya sea interna o externa y de tipo escrita, oral y audiovisual.
Se explica en el mismo que se deberán utilizar términos genéricos universales; es decir, se usará un sustantivo que denomine a la institución, profesión, al colectivo de personas o al lugar sin una carga de género, «de esta forma se evitará generalizar en masculino para hablar de grupos en los que existen hombres y mujeres”.
Se hará uso de abstractos, refiere, en lugar de hacer referencia a las personas en lo individual, se hará por su función o estado en que se encuentran. De este modo, no se hablará de asesoras o asesores, sino de personas que brindan una asesoría.
Instruyen al uso de diagonales o paréntesis en formatos, cuestionarios o contenidos en redes sociales, para que la utilización de genéricos dé cuenta de que se trata de incluir tanto a hombres como a mujeres.
“Cuando se trate de una profesión u ocupación ejercida por mujeres se deberá colocar en femenino, considerando que hay casos en los que se aceptan diferentes formas. Se evitará el uso exclusivo del masculino para nombres que tienen su correspondiente género femenino”.
Hay que descartar que los propios lineamientos que debe aplicar el OPLE se enfatiza en no utilizar términos peyorativos y cuidar el lenguaje para referirse a la población LGBTTTI, las personas que viven con discapacidad, afrodescendientes, personas indígenas, personas adultas mayores y quienes viven con VIH.
El personal del OPLE deberá evitar el uso de la arroba. No se utilizará -@- para designar de manera indistinta a hombres y mujeres, toda vez que no es un signo lingüístico y se debe evitar llamar a las mujeres por su relación con un hombre, por lo que se les debe llamar por su género y nombre.
De igual manera, en el uso de imágenes de su comunicación interna y externa, se prohíbe hacer uso de cualquiera que atente contra la dignidad de las mujeres o refuerce estereotipos y roles de género. Además tendrán que cuidar que las imágenes no tengan una orientación discriminatoria contra ningún sector.