Turismo y seguridad deben de trabajar de la mano: Fernando Torres
VERACRUZ, Ver., 29 de marzo de 2019.- Líderes de pescadores de las principales federaciones y cooperativas pesqueras de Tamaulipas, Tabasco, Campeche, Yucatán, Quintana Roo y Veracruz se reunirán este viernes 29 de marzo en el puerto de Tuxpan para solicitar al presidente Andrés Manuel López Obrador la expulsión de la compañía British Petroleum.
La compañía con sede en Londres es propietaria de la plataforma Deepwater Horizon, que en 2010 estalló frente a las costas de Luisiana, Estados Unidos, vertiendo durante semanas millones de barriles de petróleo crudo al mar, afectando con ello la actividad económica, pesquera, restaurantera y turística.
Ciento 50 mil pescadores del Golfo de México, desde Soto la Marina hasta Holbox, a través del abogado ambientalista veracruzano Horacio Polanco Carrillo, desde el 20 de abril de 2010 demandaron pagos a British Petroleum por el accidente de la plataforma petrolera Deepwater Horizon y acordaron darse cita en el puerto de Tuxpan para pedirle al Presidente organice una consulta popular para expulsar a British Petroleum de mares y costas nacionales por sus malos antecedentes operativos y legales.
Luego del accidente del pozo Macondo, en 2010, en el Golfo de México, mediante todo tipo de argucias legales han negado el pago a pescadores nacionales que demandaron en tribunales americanos justo pago de compensaciones, lo cual abogados de BP niegan diciendo que no tienen dinero, cuando de sobra se sabe que los mares y las especies pesqueras no reconocen fronteras.
No es posible que los responsables de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) no los haya descalificado al licitar bloques petroleros en el Golfo de México por estos motivos y les hayan asignado contratos de extracción de gas y crudo a BP del bloque denominado Cuenca Salinas más de 5 mil kilómetros cuadrados.
Por ese motivo, que causa enojo y frustración en el sector pesquero, se pide al presidente la Consulta Popular para que el pueblo decida si se van o se quedan.
Durante el gobierno norteamericano de Barack Obama, British Petroleum no tuvo más remedio que pagar los daños ocasionados del lado americano del Golfo de México, mientras del lado mexicano el gobierno de Enrique Peña Nieto les cedió todos los permisos para la instalación de estaciones de gasolina en toda la República, dejando en el abandono a los mexicanos y beneficiando a la transnacional como lo hizo con la brasileña Odebrecht, por lo cual piden juicio, consulta y expulsión.