Desde el Puerto Mítico

VALORES, VALEROSOS, VALEDORES…

** Hay Valores que muchos no identifican cuando los ven, sino cuando los sienten o resienten: esos aprendizajes por imitación que solo se pueden dar en Casa y con la Familia:  papá, mamá, abuelos, tíos, hermanos y hasta primos cuando los hay cerca,  y que se manifiestan en actitudes, comportamientos y acciones que nos marcarán todo el resto de nuestras Vidas.

** Valores: en los primeros años de vida cuando se nos enseña a Compartir, y sin saberlo estamos aprendiendo a no ser egoístas: «dale de tus dulces», «préstale tu juguete», «déjalo que rompa tu piñata, es tu invitado…» Sin son firmes los adultos que nos rodean en estas recomendaciones, habremos adquirido el Valor individual de la Generosidad, que con el paso del tiempo será nuestra capacidad de Solidaridad: con todos los demás: vecinos, amigos, compañeros de trabajo, y no se diga con el núcleo del cual procedemos: familia y parientes.

** Si el aprendizaje continúa, mas grandes y ya en la escuela, hay una madre vigilante que nos dice: «¿de dónde has sacado ese juguete (o ese lápiz, esa bolsa, monedas, etcétera) que no te comprado?, y hay la obligación de aclarar la procedencia  de los objetos o el dinero, de devolverlos si no son nuestros, y de tener un Castigo si los tenemos por fuerza o engaños; se nos habrán inculcado Valor fundamentales y decisivos para nuestra Personalidad: el de la Obediencia a nuestros Mayores, el de la Honradez y el de la Honestidad. Nada menos.

** Si en nuestra primera Juventud todavía gozamos del padre o la madre, la hermana o hermano mayor, que va a conocer nuestra escuela y a nuestros maestros, y de paso a echar «un vistazo» al ambiente que nos rodea, dentro y fuera y con el círculo de los amigos; estaremos aprendiendo el gran Valor de la Fraternidad, anticipado por el Valor del Respeto.

** El Respeto que se traduce en Ser, no solo Parecer: ser honesto, ser cumplido, ser colaborativo, generoso. Y que se traduce en comportamientos y hábitos para el resto de nuestras Vidas: respetamos el tiempo propio y ajeno, somos puntuales, limpios, higiénicos. Saludables de mente y cuerpo.

** Y con esta base de Valores, sabremos afrontar las violencias del mundo exterior, y el conjunto de todos los Valores a la larga de su aplicación, habrá logrado el maravilloso resultado de un entendimiento y una Conciencia de lo que es Ético en nuestras vidas y en nuestras relaciones para con los demás.

** «En alguna parte dice Graham Greene que «ser humano es también un deber».Se refería probablemente a esos atributos como la compasión por el prójimo, la solidaridad o la benevolencia hacia los demás que suelen considerarse rasgos propios de las personas «muy humanas», es decir aquellas que han saboreado «la leche de la humana ternura», según la expresión shakesperiana. Es un deber moral, entiende Greene, llegar a ser humano de tal modo…» nos dice Fernando Savater en su libro «El valor de educar» (Editorial Ariel, España, 1997).

** «Los padres son débiles solo cuando no están seguros, pero cuando lo están son determinantes, fuertes y claros. Si saben exactamente lo que hacen, no titubean aun cuando el niño llore, sienta dolor o proteste. Si hay que quitar una espina o una flecha y uno sabe que hay que cortar para salvar la vida del niño, entonces actúa con seguridad y determinación. Estos son los casos en los que el conocimiento aporta certidumbre a la decisión, acción, elección…Todo esto se relaciona con la creencia socrática de que ningún hombre escoge voluntariamente lo falso en lugar de lo verdadero, el mal en vez del bien. Se supone que la ignorancia posibilita la elección errónea. Asimismo, toda la teoría democrática jeffersoniana se basa en la convicción de que el pleno conocimiento conduce a la acción adecuada y que ésta no es posible sin el pleno conocimiento…» (La personalidad creadora. Abraham H. Maslow. Editorial Kairós, Barcelona, 1971).

** «La incapacidad de advertir nuestros auténticos sentimientos nos deja a merced de los mismos. Las personas que tienen una mayor certidumbre con respecto a sus sentimientos son mejores guías de su vida…la capacidad de serenarse, de librarse de la irritabilidad, la ansiedad y la melancolía excesivas…y las consecuencias del fracaso en esta destreza emocional básica, las perdonas que carecen de esta capacidad luchan constantemente contra sentimientos de aflicción…Es la diferencia que existe, por ejemplo, entre sentir una rabia asesina con respecto a alguien y elaborar el pensamiento autoreflexivo: «esto que siento es rabia», incluso mientras uno está furioso…señala que los circuitos neocorticales están controlando activamente la emoción, un primer paso para alcanzar cierto control…» (Daniel Goleman «La inteligencia emocional», Ediciones B, México, 1995).

** En resumen: la apetencia básica personal y lo que nos  guía por nuestra noción del deber y del ser, ese ejemplo e idea del «hombre ético» por sobre el «hombre estético» que nos narra S. Kierkegaard en «Diario de un seductor», el protagonista puede conquistar a una mujer virgen, pura, joven, pero ¿debe?. El ejemplo llevado a la praxis política de los Poderosos, debería obligar a plantear el mismo dilema: puedo, pero ¿debo?

** Aplica para todo: los «valedores» en el ideario mexicano son los que Amparan, los que socorren, los que protegen y cuidan.

** Entienda quien pueda en estas horas veracruzanas de mucha Incertidumbre: hay mucho Valor en una sociedad que se apresta voluntariamente, al ejercicio de las urnas y el Voto.

** Hubo antes un esfuerzo colectivo que se proyectó en el hacer y ser de los gobiernos y gobernantes.

** Son horas estas, de recurrir a nuestros Valores mas primarios. O aprenderlos si no se mamaron en la Infancia temprana: porque nunca es tarde para aprender ni para corregir los errores.

QUE TENGAN TODOS MIS ESTIMADOS, UN PACÍFICO Y AMOROSO FIN DE SEMANA. NOS LEEMOS EL PRÓXIMO LUNES, SI DIOS LO PERMITE.

*Este texto es responsabilidad absoluta del autor.