Desde el puerto mítico

¿RESENTIMIENTO SOCIAL? NO, INDIGNACIÓN SOCIAL…

** La llamada «clase alta» en México, país clasista, racista, intolerante y aspiracional a riqueza o nobleza sin más, y con apenas disimulo ahora, por la incesante campaña de la «Igualdad» y la «Inclusión» ; suele utilizar una frase para justificar y explicar de cuando en cuando, los reclamos de lo que considera «clase baja», y es decir que los reclamantes, los pedidores de Justicia, son «resentidos sociales».

** Lo «chistoso» por decirlo de alguna forma, es que en nuestro país miles que no llegan por mucho a «clase media» , también utilizan dicha frase como insulto: «resentido social», le han espetado a uno en algún tramo de nuestra vida laboral principalmente, cuando uno ha exigido igualdad de Salario, respeto al horario de trabajo, pago de las horas que se exigen extra jornada, trato de Respeto, exigencia de escalafón cuando lo hay y sobre todo, cuando uno denuncia al superior jerárquico: por Acoso Sexual, Laboral o Discriminatario, que abunda en nuestro país, donde a la frase injuriosa de «resentido» hay que añadir las demás que retratan a un cierto sector mexicano que se siente «superior» por el color de la piel y llama a los morenos: «de piel humilde».

** Por increíble que les pueda parecer a muchos hoy en día, en México se practica internamente desde siempre, la silenciosa Discriminación por tono de color en la piel: los menos «prietos», arremeten contra los más oscuros, a los que se les endilga, si se puede, el infamante «indio», sin pararse a reflexionar que, a menos que la familia entera haya venido de Europa (casos de generaciones gringas es mas infrecuente) todos en el país tenemos algo de blanco, de indio y de negro.

** Imaginemos pues, cómo la pasan los descendientes de esclavos africanos en nuestro país: tan solo en Veracruz la importancia y valoración de las comunidades afromestizas apenas se está visualizando, y adquiriendo por sí mismas, la autoría de su Historia: ya no más «estudios» de antropólogos, sociólogos y arqueólogos, que los mostraban como «rarezas» hace apenas tres décadas.

** Pero volvamos a la frase inicial de esta columna: «resentidos sociales». Viene a colación porque en Veracruz hace cosa de cinco años, se hablaba con los empresarios, muchos de los cuales ya habían aceptado incursionar en política y en puestos públicos, dejar sus negocios, y ya mostraban signos de enojo, de sorpresa: no podían aplicar su frase para ellos mismos porque no les cabía la indignación.

** Recuerdo a un prominente empresario xalapeño, que hizo su riqueza alrededor de los 40 años, afianzado en su bonanza material producto de negocios «con visión» y con uno que otro -decían sus competidores- tráiler de mercancía de dudosa procedencia cada tanto, pero «pecadillos» menores en el mundo comercial, y que airado comentaba a esta reportera, que cómo era posible que «gente que llegó aquí (se refería al estado de Veracruz) con una mano atrás y otra adelante, hoy viven como reyes: en un año ¡se han vuelto ricos!, yo llevo treinta trabajando y te aseguro que en un año, en dos, en tres, no amasas una fortuna así. No una lícita al menos…»

** Yo lo veía realmente contrariado, enardecido. Afirmaba que en círculos de empresarios xalapeños el constatar este hecho era un escándalo. Y uno que motivaba iguales enojos. Pero nadie decía nada, menos denunciaba ¿ante quienes?, lo que en esos entonces solo eran sospechas.

** Porque fueron estos empresarios quienes, con redes de información y relaciones en Cámaras de Comercio, Industriales, de la Construcción y todas las ramas de servicios y productos dentro y fuera del estado, los primeros en darse cuenta que a inicios de la administración de Javier Duarte, los nuevos ricos empezaron a lucirse.

** Son estos empresarios los que ahora, nos confirman fuentes cercanas a la Canaco y al Colegio de Notarios del Estado de Veracruz, quienes están aportando pruebas, cruzando documentos, allegando información, a lo que presumiblemente ya tiene la propia ASF y la SHYCP: empresas de «seguridad industrial, bancaria y comercial»; escuelas de «idiomas»; centros de «gyms» y gimnasios de «boxeo»; edificios completos en los mejores sitios de Xalapa.

** Lujosas propiedades por todo el país y en destinos turísticos, con la misma gama de negocios: buses turísticos, hoteles «spa», salones de belleza y un sinfin de sitios dedicados a reproducir las ganancias obtenidas en menos de 5 años.

** Por esto en Veracruz la noticia de que la Fiscalía General del Estado giró órdenes de Aprehensión contra el capitalino Arturo Bermúdez Zurita, quien llegó a Veracruz de empleado muy menor de Miguel Alemán y aquí se quedó para irse, hace unos meses, de la SSP solo cuando se le exhibió en televisión con lujosas propiedades en Estados Unidos; y a Gabriel Deantes que a su breve su paso por la SEV despojó de sus plazas a decenas de maestros pero siguió cobrando, a nombre de ellos, sus cheques; es una minucia para quien llegó de Tamaulipas a Xalapa vendiendo fundas de teléfono y otros gadgets que colocaba en las jardineras de Sefiplan, y después ya dentro de las oficinas de las que llegaría a ser «funcionario», supone, para estos empresarios xalapeños, un triunfo.

** Pero faltan órdenes de aprehensión similares, para al menos otros veinte visibles prósperos acaudalados: que se mantienen en estas horas, escondidos y mudos, expectantes.

** De todos ellos, los empresarios que han hecho fortuna a base de décadas de trabajo, no se les puede llamar » resentidos sociales», porque están en estas horas, aportando pruebas, ayudando al SAT, a Hacienda, a la PGR, a desmontar lo que consideran riquezas indebidas, amasadas en tiempo récord, que despojó a Veracruz y a su gente, durante casi seis años, de Progreso, Bienestar, Salud, Educación, Seguridad y Paz. Nada menos.

QUE PASEN TODOS ESTIMADOS LECTORES, UN PACÍFICO Y AMOROSO FIN DE SEMANA. NOS LEEMOS SI DIOS QUIERE, EL PRÓXIMO LUNES…