J Balvin, Marshmello, Armin van Buuren y Julión, en el FIG de León
XALAPA., 19 de septiembre de 2016.- La autoridad especializada materia de desaparecidos en Veracruz parece comparsa de los criminales: a los familiares los revictimiza, esconde información, les miente y busca dividir a los colectivos cooptando a sus integrantes con dádivas y promesas, han pedido su destitución innumerables veces, sin éxito, pero ahora, cansados, indignados y desesperados, ya preparan una demanda penal contra la fiscal especializada en Atención de Personas Desaparecidas, María Áurea Cortés García.
El 2011 fue un año fatídico en materia de desapariciones forzadas en Xalapa, la entonces Policía Intermunicipal Xalapa-Banderilla-Tlalnelhuayocan (PIXBT) era un hervidero de denuncias por corrupción, colusión con la delincuencia organizada y levantones, por lo que en mayo tuvieron que desaparecerla. La alcaldesa era Elizabeth Morales García, corría el primer y más difícil año de gobierno de Javier Duarte en materia de seguridad.
En la capital del estado, de acuerdo con el Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en Xalapa ese año hubo, oficiales, 7 denuncias por desaparición forzada, la mayoría en contra de la PIXBT así como de marinos y soldados.
Pero fue más grave. Don Carlos Saldaña Grajales, cuyos hijos de 20 años Carla Nayeli Saldaña Hernández y Jesús Alberto Estrada Martínez, fueron desaparecidos por policías intermunicipales, asegura que tan sólo en noviembre de ese año, cuando se los llevaron, fueron 14 los jóvenes que desaparecieron.
Su caso, como el de muchos, o casi todos los familiares de desaparecidos, ejemplifica perfectamente la denuncia permanente de los colectivos: las autoridades son el principal obstáculo, y el suyo especial, porque en un momento la fiscal especial y el titular Luis Ángel Bravo Contreras lo trataron de loco, de mentiroso.
En entrevista para Quadratín Veracruz, don Carlos, quien además es trabajador de Gobierno del Estado, cuenta su historia, estos años que han sido un viacrucis: “Qué te puedo decir, olvídate, el hablar del tema de mis hijos… te da una rabia, una impotencia”, y nos adelanta en exclusiva que él personalmente está preparando una demanda penal en contra de la fiscal especial, Áurea Cortés.
DETECTIVES CIUDADANOS
Cuando desaparecen sus hijos iban en el auto de Nallely, y Peugeot, Don Carlos localizó el auto a los nueve días, “lo veo circulando, ya tenía denuncia del robo, agarran a un tipo acompañado de su esposa, refiere que no sabía de la denuncia, que se lo había dado un tal Carlos Filiberto Rojano, cuando hace su declaración reconoce que fueron expolicías intermunicipales los que los habían desaparecido, toda la policía intermunicipal estaba coludida con la delincuencia”.
Fue cuando comenzó, a fondo, la investigación sobre la desaparición de sus hijos, convirtiéndose prácticamente en un detective ciudadano.
Quien llevaba el auto se llama Isaac Moreno Méndez, exagente de la PIXBT, lo detienen el día 9 de diciembre de 2011, entra al penal de Pacho Viejo el 11, y tres días después lo exonera el juez Ariel Robinson Manzanilla, quien, al asumir Luis Ángel la Procuraduría General de Justicia, se suma como jurídico al equipo del hoy fiscal.
El primer sospechoso que podría abrir una luz en el caso de sus hijos desaparecidos queda libre en 5 días y no se vuelve a saber de él. Entonces “empiezo a buscar al otro tipo, Caros Filiberto Rojano, quien supuestamente le había dado el carro a Isaac”. Ya sabía de él, tenía datos y currículum, se lo dijo a las autoridades, pero no le hicieron caso, lo tomaron por loco.
Para la Fiscalía Filiberto no existió durante cuatro años, “hasta que doy con él, se accidenta en un taxi que manejaba, a los pocos días que lo descubro, increíblemente, por arte de magia, aparece en el expediente de la investigación, desde el acta de nacimiento hasta el último día que trabajó para la Policía Intermunicipal de Xalapa. Carlos era comandante de Isaac, pero no sólo eso, también fue inspector de Comercio del Ayuntamiento y es propietario de un taxi, pero para la fiscalía no existió durante cuatro años”.
Y la FGE ni la fiscal especial han girado órdenes de aprehensión ni hecho absolutamente nada.
LA SÁBANA DE LLAMADAS
De sus primeras peticiones a la autoridad fue la sábana de llamadas, es decir, el registro de los teléfonos y mensajes que se enviaron desde los celulares de sus hijos, así como información satelital.
Don Carlos, como casi todos, comenzó la búsqueda solo, fue después de dos años que entró al Colectivo por la Paz como pudo tener acceso, “y por la fuerza que tenía en ese tiempo el colectivo”, a la carpeta de investigación 1120/2011.
“Había muchas inconsistencias, por ejemplo, no existía la sábana de llamadas, pero yo la tuve a los tres meses en mi poder”. Es lo primero, porque después viene “la interpretación, algo que nunca lo hicieron, o si lo hicieron nunca lo ingresaron al expediente”.
Cuenta que en una ocasión la fiscal Áurea Cortés le aseguró que no existía la sábana, y en una mesa con el fiscal Luis Ángel Bravo lo tomaron de loco, nuevamente, y además de mentiroso.
Pero no, hace unos meses, buscando en sus grabaciones, porque registra en su celular todo tipo de conversaciones y reuniones, precisamente por la desconfianza en las autoridades, halló una de la oficial secretaria Julieta Suárez.
“Licenciada me dice la maestra Áurea que no existe la sábana de llamadas en el expediente de mi hija… No don Carlos, sí existe, y las tiene la maestra Áurea, se las acabo de entregar todas en original”.
Esa grabación, cuenta don Carlos, la exhibió durante una reunión con colectivos el pasado 27 de abril en el World Trade Center, que encabezó el subsecretario de Derechos Humanos, Roberto Campa Cifrián. “Cuente con mi apoyo, vamos a proceder en lo que haya”, le aseguró el funcionario federal.
Una vez quiso entregarle personal al fiscal Luis Ángel Bravo un oficio pidiendo la destitución de la fiscal especial, pero “no se atrevió a darme la cara”. El oficio lo tiene también la Secretaría de Gobernación.
LA IMPUNIDAD QUE REVICTIMIZA
Colinas de Santa Fe muestra perfectamente el inservible sistema de investigación de todos los órdenes de gobierno. Un predio a un lado del recinto portuario de Veracruz que primero negó la fiscalía estatal, después investigó la PGR identificando algunos cráneos, y que finalmente es escarbado por madres de desaparecidos, y se encuentran hasta hora 81 fosas clandestinas y más de 20 cuerpos.
La información se dio a través de un mensaje anónimo, se presume, enviado al Colectivo Solecito por la delincuencia organizada. Don Carlos narra que se le pidió a la Fiscalía que se revisara de inmediato, lo que se les negó tajantemente, que había que hacer muchos trámites.
“Que no nos podíamos meter a un predio privado, los van a tirotear, los van a meter a la cárcel, afortunadamente las compañeras de Colectivo Solecito se aventaron al valor mexicano, y entraron y mira todo lo que salió”.
Cuando accedieron los llevaron… “a un punto que no era, pero la fiscal se aferró a que era ahí, yo se lo hice ver, es aquí (Colinas de Santa Fe), pero ellos insistían en que no, hasta salimos regañados, nos trató de lo peor, nos revictimizó”. Después se fueron a otro punto que se había señalado en el correo anónimo, “he hizo lo mismo”.
Cuando por fin una autoridad accedió a analizar Colinas de Santa Fe, fue la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido), y encontraron 6 cráneos, meses después el Colectivo Solecito entró, y en el mismo sitio donde buscó la autoridad federal, hallaron cuerpos enteros.
FISCALÍA MAQUIAVÉLICA
Divide y vencerás, reza el conocimiento bélico, y eso es justamente lo que está haciendo, además de esconder información, difamar, revictimizar y mentir, la fiscal especial Áurea Cortés y el fiscal Luis Ángel Bravo, “hemos visto a varios compañeros que la Fiscalía se ha concretado a tratar de dividir a los grupos, porque les conviene”.
Dice Don Carlos que abandonaron el Colectivo por la Paz Xalapa que dirige Sara González Rodríguez, de quien se rumoró, quiso obtener una diputación, “nos promete que vayamos siempre con la Fiscalía, que nos pagan las comidas, los viajes, no buscamos ningún puesto político ni ningún otro recurso económico, buscamos a nuestros familiares”.
Claro, sin tapujos, dije que Sara ha sido comparsa del fiscal, y por ello se empezaron a dividir. Él y 12 personas más se salieron y crearon su propio colectivo, Familiares Enlaces Xalapa.
Hace poco su esposa le entregó a Roberto Camapa un oficio pidiendo la destitución de Áurea Cortés, fiscal especial para la atención de las víctimas de desaparición , pero don Carlos Grajales lleva ya algún tiempo preparando la demanda penal contra la funcionaria que ha sido la corona de espinas del viacrucis de decenas de familiares de desaparecidos en Veracruz.
“Que Dios perdone a quien busca otros intereses que buscar a nuestros familiares”, concluye en tono afligido.