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BOCA DEL RÍO, Ver., 12 de diciembre de 2016.- La crisis financiera del Gobierno de Veracruz tiene dimensiones que superan todo lo imaginable, afirmó el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares.
Detalló que parte importante del trabajo que ha realizado su gobierno ha sido dimensionar el enorme hueco financiero que afecta a Veracruz, como consecuencia de la corrupción y las medidas que deben de tomar para resolverlo.
Dijo que hay “una crisis inédita; no hay registro histórico de algo similar, en 12 años llevaron a Veracruz a la quiebra”, y al exponer la situación financiera del estado, aseveró que en saqueo y robo al erario público participaron más de 100 empresas fantasma, que beneficiaron a algunos dueños de medios de comunicación.
Veracruz se declara en quiebra financiera, “demando al Gobierno Federal respuesta positiva a las reiteradas solicitudes de encontrar soluciones a esta crisis que fue consentida y solapada”, subrayó.
Explicó que la deuda a corto plazo asciende a 56 millones de pesos, y “hemos encontrado préstamos y documentación injustificada de egresos; al respecto, comentó que tan solo en diciembre, la entidad cuenta con un déficit de 7 mil millones para cubrir pagos correspondientes.
Yunes Linares pidió a los veracruzanos su comprensión para con las medidas que se deberán tomar, y reiteró, “no habrá perdón ni olvido. Quien sumió a Veracruz en esta situación pagará y enfrentará a la Ley. No habrá impunidad.
Al insistir que el mantenimiento de la Casa Veracruz cuesta alrededor de 60 millones al año y cuenta con 50 trabajadores, el Gobernador aseguró que no usará el inmueble.