Comerciantes agreden y amenazan a reporteros de Orizaba

ORIZABA, Ver., 14 de diciembre de 2021.- Un vendedor de barbacoa y un supuesto cliente agredieron verbalmente a comunicadores y los amenazaron cuando documentaban un presunto abuso de autoridad cometido contra la comerciante María de Lourdes Martínez Parra.

La agraviada relataba cómo se había perpetrado el despojo, mientras un reportero gráfico tomaba fotografías del local para ilustrar la información, cuando de manera agresiva un supuesto agredió al fotógrafo diciéndole “¿qué te pasa güey, por qué me tomas fotos a mí?”

Mientras el reportero gráfico le trataba de explicar que no le había tomado la foto a él directamente, sino al local, la agresión continuó, y una vez más le grito: «todo por tu culpa, hijo de la chingada».

Dado a que los demás compañeros reporteros continuaban grabando y documentando la agresión verbal, otra comunicadora también recibió la consigna que dejara de grabar.

Segundos después, el propietario del local El Borrego de Oro se acercó con la comerciante María de Lourdes Martínez cuestionándola por qué le estaban sacando fotos a su negocio, y al tratar explicarle que lo único que hacía era defenderse de un abuso de autoridad, el hombre le dijo que eso lo viera con la administración.

Pero al observar que los reporteros continuaban grabando video y sacando fotografías, trató de intimidarlos dirigiéndose contra la reportera: «no me fotografíes porque te doy un madrazo”.

El vendedor de barbacoa continuó gritando e insultando, sin importarle que estaba siendo grabado y en presencia de demás locatarios y comensales. «Ningún pendejo puede sacarle fotos a algún negocio, ni a una persona».

Cabe mencionar que se trataba de un espacio público y el fotógrafo estaba debidamente uniformado y acreditado.

Debido a las agresiones, los comunicadores solicitaron el apoyo de la Policía Municipal, quien arribó en cuestión de minutos y fue así como el comerciante agresor dejó de agredir a los reposteros, mientras que el supuesto cliente optó por retirarse al saber que se vería envuelto en problemas.