Teresa Gil/Libros de ayer y hoy
Centenaria universidad es la Universidad Veracruzana, pues en el año de 1926, un primero de mayo de ese año, el gobernador de Veracruz, Gral. (1879-1968) de los muy pocos gobernantes que le intereso el progreso de la capital del Estado de Veracruz, el proyecto una ciudad jardín proyecto que se vio inconcluso por la falta de voluntad política del Presidente de la Republica Plutarco Elías Calles, que la dio la razón a las compañías petroleras extranjeras que al gobernador de Veracruz, que su único delito fue cobrarles los impuestos correspondiente a la extracción del oro negro del subsuelo veracruzano. Y fue desaforado en 1927, antes de concluir su mandato constitucional.
El General Heriberto Jara Corona, creo sin dudarlo ha sido el único gobernador de Veracruz desde 1824, ha mostrado con hechos su amor por la ciudad de Xalapa, ahí están las obras, como el centenario Estadio Jalapeño, inaugurado en el 20 de septiembre de 1925. Le dio cobijo a la vanguardia cultural de los Estridentistas, el primero de mayo de 1926, puso la primera piedra la creación de la Universidad Veracruzana, en aquellos años sólo se logró la creación del departamento universitario; en 1920 la ciudad era sede de la primera carrera universitaria de jurisprudencia, en 1926 la primera piedra y 18 años después la nace formalmente la Universidad Veracruzana, la segunda instancia educativa superior del Estado desde la fundación de la Escuela Normal Veracruzana fundada 58 años antes. Era el Veracruz que crecía lentamente.
En 1944, cuando se funda la Universidad Veracruzana, su sede principal fue la capital del Estado, nuestra ciudad de Xalapa, en estos 80 años la universidad fue teniendo presencia en el norte, centro y del Estado de Veracruz, en cinco regiones donde actualmente opera la máxima casa de estudios para los veracruzanos.
No tengo la idea cuantos veracruzanos hemos egresado de sus aulas desde los 80 años si somos millones, amén de aquellos que ingresaron a realizar sus estudios y por tantas circunstancias que no lograron concluirlos. Sin contar los miles de alumnos de otros estados del sur del país, y también un número de estudiantes de las diferentes nacionalidades del mundo que han cursado sus estudios universitarios.
Todos los xalapeños ya nacemos vínculos a la Universidad, por todo tipo de circunstancias, en mi caso, crecí en el hogar con grupo de pupilos, estudiantes universitarias de Altotonga que vivían en el hogar materno, en su mayoría de los casos eran familiares, y el hogar a una cuadra de la Estación de Autobuses del AU. Entonces de niño muchas veces los acompañaba a las diversas actividades culturales. Sin olvidar que mi jardín de niños, a un lado de la Facultad de Economía, los quioscos del jardín de niños “Bertha Von Bloumer” estaban abiertos, y en el invierno tomábamos clases en los salones de Economía.
A los 16 años me vinculo a las actividades del Instituto de Intercambio Cultural México- URSS “José Mancisidor” todos fundadores era universitarios del área de humanidades y las otras áreas académicas de la Universidad, así Raymundo Aguas Franco, era catedrático del Ciencias de la salud, Carlo Antonio Castro Guevara, (1926-2010) docente de la Carrera de Antropología, Octavio García Mundo y Javier Ortiz Aguilar, Manuel Bautista Mercado, académicos de la carrera de historia, Miguel Andrade Huerta, era un editor independiente, luego de su paso por las aulas universitarias.
Así que cuando ingresé a la carrera de Historia de la UV, ya tenía docentes conocidos, sin olvidar a mi vecino Francisco Rubén Córdoba Olivares (1939-2006). Como se afirma que la Universidad es nuestra Alma Mater, claro que pues hasta la muerte nos acompañaran todos sus enseñanzas y oportunidades laborales. En estos 80 años, estoy muy lejano a todas sus actividades. Pero recuerdo con mucho cariño las actividades del 50 aniversario, en 1994, disfruté cada una de las actividades programadas para dicho aniversario. Era becario para la realización de la tesis de licenciatura a lado del Doctor Gonzalo Aguirre Beltrán (1908-1996) quién fuera rector de 1956-1959, el primer gran transformador en una universidad especializada en humanidades y las artes.
En 1985, creó Raúl Hernández Viveros, fue director de la Editorial de la UV, por un par de meses estuve ayudándole sirviendo el vino y el café en las presentaciones de las nuevas publicaciones.
Siendo estudiantes con mis compañeros organizamos el XIII Congreso Nacional de Estudiantes de Historia en 1991, sin ninguna experiencia en el tema, pero si contamos con todo el apoyo del rector Rafael Hernández Villalpando. Otros de los grandes recuerdos fueron los 4 viajes de estudios con mis compañeros y los profesores. En particular puede disfrutar de toda la oferta cultural que tenía la Universidad desde los conciertos de la Orquestas Sinfónica de Xalapa los viernes ,( 1979, el cincuntenario de la Orquesta Sinfonica de Xalapa, fue el lazarillo de uno de los fundadores: Francisco Montiel Viveros) los festivales de teatros, en lo deportivo siempre he negado, pero mis compañeros si le entraron a los deportivos. Diversas muestras de cine internacional, presentaciones de libros, conferencias,talleres, y unas que otra marcha izquierdosa, y también en contra de Laguna Verde, ya energía nuclear en el golfo de México.
El Frente Democratico Nacional, tiene su última asamblea el lunes 12 de enero de 1988, en Humanidades, ahí Cuautémoc Cárdenas Solorzamo. Sale para el hotel Xalapa y firma la constitución del Frente Democrático Nacional en el proceso electoral en contra del PRI y su candidato presidencial Carlos Salinas de Gortari.
También llevo en mi recuerdo y el corazón, los bailes de quema de cada una de las carreras que se ofertan en la antigua Unidad de Humanidades. Mi servicio social lo realicé en el Centro de Estudios Históricos con la Mtra. Olivia Domínguez Pérez, investigadora. Las primeras becas que recibí fueron la UV, y al integrarme al proyecto Papaloapan, coordinado por los investigadores: José Velasco Toro y Guadalupe Vargas Montero. Que nos dio la oportunidad de conocer el trabajo en campo en las poblaciones de la Cuenca Baja del Papaloapan.
Con el maestro Octavio Castro, y Julio César Martínez García, por un año estuve con ellos, en el área de asesores. También hubo las oportunidades de dar clases en la facultad de historia, me designaron una materia sobre el siglo XVIII. Como en las carreras de Geografía, Economía, Antropología. Como también trabajar el área de postgrado. Y la beca para ir a realizar los estudios de maestría y doctorado en historia en la Universidad Internacional de Andalucía y la Complutense de Madrid. Un gran impacto me causo al visitar la rectoria de la Universidad de Lodz en Polonia, un libro con la colección completa de la Revista de la Palabra y Hombre. Era la huella de una generación de becarios de la Universidad Veracruzana a la Polonia Comunista.
Mi agradecimiento y reconocimiento a sus ex rectores que han distinguido con el saludo y la amistad, Gonzalo Aguirre Beltrán, Fernando Salmerón, Aureliano Hernández Palacios, Fernando García Berna, Rafael Velasco Fernández, Roberto Bravo Garzón, Salvador Valencia Carona, Rafael Hernández Villalpando, Emilio Gidi, Víctor Arredondo, Raúl Arias Lovillo, Sara Ladrón Guevara, y Martin Aguilar Sánchez, quién a las primeras horas de su rectorado le solicite una oportunidad laboral, y no hubo eco. Sin olvidar a los compañeros adminstrativo e intedencia.
No hay ningún tabulador del mundo que me pueda calcular la deuda que tengo con mi Universidad, eso sí un eterno agradecimiento por mi formación.