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XALAPA, Ver., 1 de diciembre de 2016.- El discurso político cambiará, pues se hablará a la sociedad siempre con la verdad, indicó el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares durante su toma de protesta como gobernador, y destacó que habrá castigo con toda la severidad de la ley para los que fueron cómplices de llevar a Veracruz a la situación en la que se encuentra actualmente.
En este sentido, haciendo un poco de historia, comentó que desde hace 12 años advirtió que a la entidad lo operaría una banda delincuencial, por lo que decidió emprender las investigaciones necesarias por la vía legal y de manera privada, dedicando muchas horas de su vida documentando todo lo que sucedía, encontrando que los delincuentes eran muy grandes y poderosos.
“Desde 2004 se vincularon con la delincuencia organizada que los dejaron entrar a cambio del pago de millones de dólares. Gobierno al servicio de la delincuencia organizada y gobierno de delincuentes organizados, así lo señala la PGR que ya los persigue, por eso Veracruz empezó a caer desde hace 12 años en una espiral de violencia y corrupción imparables”, dijo.
Asimismo, expuso que cuando decidió hacer campaña este 2016 sabía los riesgos a los que se sometía él y su familia, con ofensas y calumnias, pero también a un grave peligro, pues buscaban que no hubiera la alternancia para evitar que saliera a la luz toda la corrupción que envolvía al gobierno de Veracruz, misma que lo obligó a actuar personalmente y acudir a la PGR y dar a conocer toda la información con la que contaba.
“Con información y datos sobre sus debilidades personales de los cómplices, me di a la tarea de buscarlos y encararlos, pero antes hicimos pública parte de la información para que supieran que sabíamos y empezaron a caer las primeras fichas en el tablero, renuncia de funcionarios públicos y empezaron a derrumbar las murallas que protegían el castillo de la corrupción”.
Yunes Linares explicó que buscó uno a uno y logró ponerse frente al responsable del diseño de las estructuras financieras para lavar dinero que robaban de las arcas municipales, detallándole el destino de los recursos públicos de la entidad que iban a parar a las bolsas de Javier Duarte y sus cómplices.
“’Yo era el responsable de la tubería para llevar el dinero de un lado a otro, pero la tubería estalló porque le metimos demasiado’, me dijo con cinismo, me pidió piedad porque debía llevar a su hijo enfermo a Houston, y le dije que era una vileza llevarlo y hablo de Juan José Jaramillo, uno de los herederos financieros de la banda, me dio información y entregó bienes”.
Además, expuso que en Canadá encontró y enfrentó a Moisés Manzur, del cual tiene un relato, quien le expuso que era el operador de los recursos y bienes de los Duarte Macías, pues fue él quien adquirió los ranchos, obras de arte y demás propiedades que se podrán recuperar y que se dará cuenta de ello.