Promueven tradiciones en escuelas de Poza Rica a través del cine
CIUDAD DE MÉXICO, 24 de enero de 2017.- Los diputados federales priistas, Jorge Carvallo Delfín y Alberto Silva Ramos, están vinculados con la red de farmacéuticas acusadas de proveer al Gobierno de Veracruz medicamentos falsos contra el cáncer y pruebas apócrifas para detectar VIH-Sida.
Reforma señala que Carvallo Delfín, ex secretario particular de Javier Duarte de Ochoa, es pariente directo de la familia Beceiro, que durante la administración del exgobernador Fidel Herrera Beltrán constituyó un conglomerado de empresas beneficiarias de contratos millonarios de los últimos dos sexenios de la entidad.
Las firmas vinculadas a los Beceiro son Maxbec, S.A. de C.V.; Especialidades Médicas del Sureste, S.A. de C.V.; Grupo Empresarial Heberen, S.A. de C.V.; Labssa, S.A. de C.V., y Lidmed, S.A. de C.V.
De acuerdo con las actas constitutivas, los representantes legales son Andrés y Rocío Beceiro Delfín, primos hermanos de Carvallo Delfín e hijos de Andrés Beceiro López, presidente de la Alianza Ciudadana de Empresarios Veracruzanos y allegado a Fidel Herrera.
Esas empresas fueron denunciadas por la actual la administración de Miguel Ángel Yunes de proveer de medicamentos falsos a la Secretaría de Salud (SS) desde 2010.
El mandatario denunció que productos del laboratorio Roche fueron clonados y desprovistos de su principio activo, por lo que incluso hubo niños con cáncer que como tratamiento prácticamente recibieron agua destilada.
Las denuncias presentadas por Yunes señalan que tan sólo Maxbec, cuyo representante legal es Andrés Beceiro Delfín, facturó 109 millones entre 2006 y 2013 en contratos con el Gobierno de Veracruz.
Asimismo, de acuerdo con el portal de compras médicas del IMSS, en 2014 la empresa facturó 563 mil 839 pesos en gasas, jeringas, telas adhesivas y catéteres al Hospital de Especialidades 14 «Adolfo Ruiz Cortines» de Veracruz.
Carvallo Delfín, quien en 2015 fue titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y, ha negado tener vínculos con las empresas denunciadas, pese a que los representantes legales de las firmas son sus primos y él ha sido acusado, según medios locales, de favorecerlos con contratos.
«Lo que hicieron con los niños veracruzanos es un crimen deleznable, atroz, que no puede quedar impune, pero tampoco voy a permitir que sea utilizado como ariete político para quienes se empeñan en la guerra sucia y en tender cortinas de humo», escribió en Facebook el martes 16 de enero.
Por su parte, Alberto Silva Ramos, además de haber sido dirigente estatal del PRI en 2015, se desempeñó como funcionario en los Gobiernos de Fidel Herrera y Javier Duarte.
El también coordinador de Comunicación Social y Secretario de Desarrollo Social con Duarte, está involucrado directamente en el otorgamiento de contratos a empresas vinculadas a la familia Beceiro, y es acusado de complicidad en el pago de 514.9 millones a empresas fantasma para campañas inexistentes en medios de comunicación.