
Avanza en Veracruz nómina única para burócratas
XALAPA, Ver., 2 de septiembre de 2025.- Con el propósito de consolidar a Veracruz como un destino competitivo, auténtico y sostenible, la Secretaría de Turismo llevó a cabo con gran éxito la Caravana Turística de Veracruz en la Ciudad de México, Puebla y Tlaxcala, mercados estratégicos y principales emisores de visitantes hacia la entidad.
Con la representación del secretario de Turismo, Igor Rojí López, el evento reunió a más de 300 tour operadores, agencias de viaje, hoteleros y promotores de turismo comunitario, quienes pudieron conocer de primera mano la riqueza natural, cultural y gastronómica que distingue al estado.
El encuentro tuvo como objetivo ampliar el flujo de visitantes hacia las siete regiones turísticas de Veracruz y, al mismo tiempo, estrechar lazos de colaboración con actores clave de la industria turística nacional, fortaleciendo la proyección de la entidad en el corto y mediano plazo.
La Sectur refrenda su compromiso de seguir impulsando iniciativas que consoliden a Veracruz en los principales mercados turísticos de México, destacando su diversidad regional y posicionamiento a nivel nacional e internacional. El cuadro roto de Frade: una travesura que se convirtió en legado
En la Calle Manuel Núñez Romeu, frente a la imponente Iglesia La Asunción, se alzaba la casa de Ramón Frade León. Allí, en una tarde de verano, Lucila y su amiga jugaban despreocupadas bajo la escalera, envueltas en la alegría infantil. Pero entre risas y movimientos inquietos, un descuido transformó el juego en un pequeño desastre: un cuadro del célebre pintor cayó y se hizo añicos.
El regaño de Doña Reparada fue inmediato, pero para las niñas, aquel incidente no significaba más que una travesura pasajera. Solo con los años, cuando la infancia quedó atrás, comprendieron la verdadera magnitud de su acción: habían dañado una pieza de Frade, un artista cuyo legado se grabaría en la memoria colectiva.
Así, la historia del cuadro roto no quedó en el olvido. De boca en boca, atravesó generaciones, convirtiéndose en un relato que entrelaza la inocencia infantil con el peso de la historia y el arte.1. El joven soñador
En las verdes montañas de Cayey, un joven llamado Ramón soñaba con capturar la esencia de su tierra a través del arte. Pasaba sus días dibujando el paisaje y a la gente que lo rodeaba. Un día, mientras caminaba por los senderos del bosque, encontró a un viejo pintor que le enseñó técnicas y secretos del arte. Ramón se comprometió a dedicar su vida a plasmar la belleza de Puerto Rico.
2. La promesa del jíbaro
Ramón se encontraba pintando en la plaza de Cayey cuando vio a un campesino cargando una pesada carga de caña. La fuerza y la dignidad del hombre inspiraron a Ramón, quien le prometió que algún día su imagen sería conocida por todos. Así nació «El pan nuestro», un cuadro que capturó la esencia del jíbaro puertorriqueño y se convirtió en un símbolo de su pueblo.
3 Su lienzo
Decidió capturar la alegría y el espíritu festivo en una serie de pinturas. Las misma se convirtieron en su legado visual que recordó a todos la importancia de preservar las tradiciones culturales.
4. El viaje de regreso
Después de años de estudio y trabajo en el extranjero, Ramón regresó a Cayey con una nueva perspectiva y habilidades mejoradas. Al ver su pueblo natal con nuevos ojos, se sintió inspirado a crear obras que mostraran la evolución de la vida en la isla. Sus cuadros reflejaban la mezcla de modernidad y tradición, y se convirtieron en una ventana al pasado y al futuro de Puerto Rico.
5. La última pincelada
En sus últimos años, Ramón pasaba más tiempo en su estudio en Cayey, rodeado de recuerdos y bocetos. Un día, mientras trabajaba en su obra final, un joven artista llegó buscando inspiración. Ramón compartió sus experiencias y enseñanzas, asegurándose de que el legado del arte y la cultura de Puerto Rico continuaría. Con la última pincelada, Ramón cerró su vida sabiendo que su amor por su tierra viviría a través de generaciones