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Teresa Gil/Libros de ayer y hoy
Tal como le hemos venido dando puntual seguimiento, los astros empiezan a alinearse en el municipio de Acayucan.
Es ya el mes de marzo y los días que están por venir en la agenda política de La Llave del Sureste serán verdaderamente cruciales, es todo o nada, aquí no caben más las medias tintas.
Se trata de un lugar clave en la vida económica del estado de Veracruz y el partido que gobierna, Morena, no puede ni debe dejar pasar una vez más la oportunidad de ganar las elecciones municipales y desterrar para siempre al grupo caciquil que se ha encargado de mal administrar a Acayucan, primero a través de una alianza PAN- PRD y ahora lo intenta de nuevo sólo cambiando su color de piel a naranja.
Como se dice en el argot del pueblo del sur, «te conozco bacalao aunque vengas disfrazao», es aquí donde Morena no puede darse el lujo nuevamente de perder de vista el objetivo, ya los habitantes tienen plenamente identificada esta marrulleria que dista mucho de ser una jugada de ajedrez.
Nueve de cada diez familias acayuqueñas ven con buenos ojos sólo a una figura preponderante de la verdadera izquierda, Deysi Juan Antonio, no hay otra con la formación política y los arrestos para enfrentar esta próxima contienda municipal.
Nadie como ella conoce las entrañas de una batalla de esta magnitud, ya les ganó por lo menos un par de ocasiones a esta y otras fuerzas políticas, una logrando la diputación local y la otra precisamente la presidencia municipal, aunque las malas mañas de los ahora color naranja le arrebataron el triunfo.
Los habitantes de Acayucan lo tienen muy claro, es ahora o nunca, y sólo con la maestra será posible que por fin Morena llegue a ocupar la silla principal de la alcaldía.