Los enemigos del pueblo
El Bronco, una apuesta fallida
Los empresarios de Nuevo León que impulsaron y financiaron la campaña de Jaime Rodríguez -El Bronco-, ya están preocupados porque su carta contra el PRI y el PAN nomás no da una.
En una sobremesa de industriales regiomontanos se comentaba en días pasados que había que apuntalar a Fernando Elizondo -el coordinador del gabinete de El Bronco-, quien no estaría nada contento con el desempeño de su pupilo.
“Si Fernando tira la toalla, ahí sí mucho cuidado”, es lo que se dice entre los que llevaron al Bronco al gobierno estatal.
La idea era que Elizondo llevara las riendas del gobierno tras bambalinas y que El Bronco “entretuviera a la raza”.
Pues no ha ocurrido así. Jaime Rodríguez ya se la creyó y los problemas comienzan a incomodar, como es el regreso de la inseguridad en el estado y la falta de rumbo de su gobierno.
Nadie de los suyos paró las antenas cuando Rodríguez nombró secretario de Desarrollo Sustentable (desarrollo urbano) a un socio suyo en cuestiones inmobiliarias, Roberto Russildi.
Como se trataba de un destacado empresario (del ramo de la construcción, por cierto) nadie dijo mucho. Pasó. Pero era ya una mala señal de por dónde podían ir las cosas.
Cinco funcionarios de alto nivel han renunciado a sus cargos en cinco meses de gobierno.
El más reciente, este fin de semana, fue Rogelio Benavides Pinto, subsecretario de Administración del gobierno del estado, que abandonó el cargo para facilitar una investigación por la compra de 200 mil cobertores al triple de su precio normal.
Con el frío de los neoleoneses más pobres, alguien del gobierno del Bronco hizo el negocio de su vida.
Y llegaron al poder de ese pujante estado con la bandera de que iban a barrer con los corruptos.
Doscientas mil cobijas compradas al triple de su precio unitario normal en tiendas. ¿De qué porcentaje fue el moche?
No lo sabemos, pero eso es un atraco a las finanzas públicas de Nuevo León, de parte de los “independientes” que llegaron con el estandarte de la honestidad. Y apenas llevan cinco meses.
También estos “independientes” se presentaron como rudos procuradores de justicia, Pues bien, el cuatro de febrero salieron de la cárcel los secuestradores y asesinos del empresario Damián López del Río, a pesar de haber recibido sentencias de hasta 90 años de prisión. ¿Qué pasó?
Corrió con suerte El Bronco de que se atravesara la visita papal y se bajó el perfil a la peor tragedia en el sistema carcelario del país, con los 49 muertos en el penal de Topo Chico. Un problema que él se había comprometido por escrito a resolver y le estalló antes de que moviera un dedo.
Falta la cereza del pastelazo que ha resultado el gobierno de El Bronco: KIA podría cancelar su instalación en Nuevo León, por las nuevas trabas que le pone el gobierno de Jaime Rodríguez.
Se trata de una inversión de 15 mil millones de dólares que generaría 30 mil empleos directos. Otros estados de la frontera norte ya han levantado la mano y quieren a la empresa coreana en sus entidades.
¿No que muy eficaz, muy bravo, muy bronco el señor independiente? Hay señales de naufragio a cinco meses de iniciado su gobierno.