Atención de Hospital de Tlalixcoyan, en riesgo por clausura de puente
CÓRDOBA, Ver., 6 de julio de 2015.- La idea de darles de comer a los migrantes surgió cuando nuestra madre, doña Leonila Vásquez, nos encomendó traer el pan y leche, y al cruzar las vías férreas notamos que venía el tren y nos paramos a esperar que pasara, ahí tuvimos la oportunidad de darle pan a unos indocumentados que nos pedían alimento, y regresamos a nuestra casa sin el mandado, pero con la satisfacción de haberles dado de comer a los hambrientos, recordó María Antonia Romero Vásquez, integrante de Las Patronas.
Explicó que de esta situación nació la iniciativa de doña Leonila de alimentar desde marzo de 1995 a los centroamericanos que viajan a bordo de La Bestia en busca del sueño americano.
Afirmó que para Las Patronas, candidatas al premio Princesa de Asturias, es una satisfacción darles de comer a los migrantes, y aceptó que pensaron que nadie se iba a interesar por esta labor que desempeñan.
Mencionó que desde hace más de 20 años se han dedicado con sus hermanas a alimentar a los migrantes, que llegan desde Centroamérica y algunos de otros de otros estados, como Chiapas y Tabasco.
Toña, como le llama su familia, compartió una de las historias más conmovedoras de Las Patronas: un joven de 16 años tuvo la oportunidad de descender del tren para recibir las bolsas de alimentos y dárselas a sus compañeros de viaje, pero el destino le jugó una mala pasada y después de compartir la comida cayó en las vías del tren, y le pasó encima de uno de sus pies, dejándolo inmóvil y tirado a un costado de las vías.
De inmediato fue auxiliado por Las Patronas, quienes lo llevaron al Hospital General Yanga, donde fue atendido y con la colaboración de algunos sectores de la población lograron darle una prótesis.