Carlos Ramírez/Indicador político
PROSPERIDAD AUSENTE
No puede haber una percepción de prosperidad si la legal retribución de un trabajo o servicio prestado no se otorga en tiempo y forma; es inhumano, es ilegal. Así cierran el año muchos burócratas, pensionados y proveedores del Gobierno del Estado. El sol no puede taparse con un dedo y, como lo mencionamos hace días en otro texto, se escuchaban rumores acerca del retraso en algunas prestaciones para trabajadores, incluso otros medios (como versiones.com.mx) también tomaron el tema y publicaron documentos oficiales en los que se trataba el tema.
La semana pasada fuimos testigos, gracias a notas periodísticas, de reuniones entre líderes sindicales y representantes de organizaciones que han sido afectadas por el retraso en sus pagos; muchos empresarios se han pronunciado por no volver a ofrecer productos o servicios al gobierno, por la desconfianza que ha generado como cliente, y a los trabajadores no les queda más que aguantar más, seguir apretándose el cinturón (afectando a familias, niñas y niños) hasta que les caiga su lana.
Lo que escribimos no son inventos, basta con poner atención a la opinión pública, leer algún medio local, platicar con algún vecino o familiar, y todos se preguntan ¿dónde está la mentada prosperidad?
Y es que el gobierno estatal no ha parado en manifestar una intención positiva, en implementar políticas en beneficio de veracruzanas y veracruzanos, pero la percepción es otra, entonces ¿qué pasa? Todo va desde vacíos informativos -que no son cubiertos con la información oficial oportunamente, para enterar a la sociedad de hechos positivos; y cuando se trata de contener la ola de cuestionamientos es demasiado tarde y, nuevamente, la percepción se trastoca-, hasta malos manejos del dinero en las instituciones y de eso no tiene toda la culpa el gobernador Duarte sino su equipo de comunicación, las y los encargados del manejo de mensaje en campañas y muchos empleados en los que el mandatario ha confiado responsabilidades y no han estado a la altura de un Veracruz que requiere funcionarios de alto nivel.
Eso de la percepción, tanto mencionada hoy, es bien importante porque marca el pulso tanto del lado de la sociedad como del gobierno. Un servidor insiste que mucho tiene que ver el vacío informativo, pero no debe ser llenado simplemente con el boletinazo, hay que establecer verdaderas estrategias en las que el mensaje y sus emisores se presenten a la sociedad por medios efectivos y de impacto suficiente; superar las conferencias de prensa de los lunes muy temprano y crear una real agenda de medios, de intervenciones, de inserciones, de declaraciones y no dejar al empirismo de la entrevista banquetera el manejo de una situación mediática que podría controlarse anticipadamente; pero eso no se dará hasta que al frente de las oficinas de comunicación social en el estado sirvan verdaderos comunicadores de experiencia probada -que sí los hay, pero son pocos-; se necesita poner esas responsabilidades en manos de expertos en teoría de comunicación, así como se pone a profesionales de las ciencias políticas en las áreas de gobernación.
Según Jordi Rodríguez Virgili, profesor de Comunicación Política, Sistemas Políticos Comparados y Comunicación Electoral de la Universidad de Navarra (España), los consumidores habituales de informativos televisivos y los lectores regulares de prensa tienen más conocimiento y confianza en la política e incluso se muestran más comprometidos con la vida política; mientras que los ciudadanos que se exponen a programas sensacionalistas y de entretenimiento suelen presentar altas cuotas de desconfianza y desafección política; de tal manera que el más informado políticamente, el que más confía y el más participativo, es el que más se expone a la cobertura mediática y aquellos más expuestos a la cobertura mediática de los asuntos públicos incrementan su confianza y compromiso con la política. Es por demás urgente, entonces, eliminar sus campañitas de propaganda como si el estado y el trabajo de los servidores públicos fueran promociones de Electra, descuentos en Farmacias del Ahorro o de Oxxo. Seriedad señoras y señores, su público (los veracruzanos) lo merecen. La percepción social es reflejo de sus acciones y el espejo son los medios.