XALAPA, Ver., 23 de octubre de 2014.- Habitantes del municipio de Banderilla se quejaron por la calidad del agua que reciben en sus hogares pues desde hace unos meses el agua potable tiene un color achocolatado e incluso con mal olor.
Los vecinos han acudido en reiteradas ocasiones a solicitar explicación al ayuntamiento que preside Esteban Acosta e incluso a la Comisión Municipal y no han recibido respuesta.
Martín Barradas, vecino de la calle Cuauhtémoc, narró que hay ocasiones en que las tuberías se tapan por el lodo con que llega el vital líquido a las casa y que no puede ser usado para actividades como bañarse, preparar los alimentos o lavar los trastes.
«Es una cochinada, ya se le ha dicho al alcalde y no hace nada. Hemos ido hasta con cubeta en mano a la Comisión de Agua y no nos reciben o nos dicen que esa agua no es la que cae en las casas pero de dónde la vamos a sacar», cuestionó el afectado.
Las fuertes lluvias que se han dejado sentir en la región, han provocado el cierre de las válvulas para evitar el taponamiento de las tuberías, pero el ayuntamiento no avisa a los ciudadanos de los cortes o su duración.
Otra vecina de la calle Melchor Ocampo, Margarita Fajardo, señaló que el agua llega tan sucia que los vecinos cierran sus válvulas para evitar que llegue a los tinacos pues no sirve más que para las descargas del baño.
«Yo no entiendo cómo quieren que nos bañemos con esa agua tan puerca. Yo le pregunto al presidente municipal si en su casa cae esta agua que además apesta», dijo.
Esta situación es recurrente desde hace varios meses e incluso los vecinos han sostenido reuniones con el alcalde pero hasta el momento no ha habido ningún tipo de explicación o acciones para evitar que esta agua llegue a los hogares de los banderillenses.