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MEDELLÍN DE BRAVO, Ver., 27de enero de 2015.- Jorge Sánchez Ordóñez, hijo del periodista Moisés Sánchez Cerezo, asesinado el 2 de enero, no reconoció que el cuerpo de su padre sea el que encontraron en un paraje de Manlio Fabio Altamirano, el fin de semana.
A pesar de las pruebas de ADN que presentó la Fiscalía General del Estado, el joven dijo que su familia esperará a que la Procuraduría General de la República (PGR) acabe la investigación que realiza de manera paralela.
Además, adelantó que ellos mandarán a hacer una prueba con un laboratorio particular para verificar si el cadáver es el de su padre, esto será apoyado con organizaciones no gubernamentales como Articulo 19.
“Estamos esperando los resultados de la PGR, ellos apenas tomaron las pruebas antier, creo, y apenas ayer los iban a mandar allá a la capital y ellos tienen los resultados hasta la próxima semana y mientras ellos sigan con la investigación, hace ratito hablé con ellos y me dicen que todavía continúan con la búsqueda, de hecho, con su investigación paralela y nosotros a la espera de lo que digan ellos”, dijo.
Por lo pronto, Sánchez Ordóñez afirma que su familia y él tienen esperanzas de que su padre sea hallado con vida en las próximas horas por el gobierno federal.
Moisés Sánchez Cerezo era un taxista, reportero ciudadano y activista social que trabajaba en la comunidad de El Tejar, municipio de Medellín de Bravo.
El 2 de enero fue plagiado de su domicilio y el fin de semana pasado, dio a conocer el fiscal del estado, Luis Ángel Bravo Contreras, su cuerpo hallado en un paraje entre Jamapa y Manlio Fabio Altamirano.
“Vamos a hacer un examen de ADN particular, independiente, con apoyo de Artículo 19, están en Veracruz y están revisando el expediente y todo eso”.