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POZA RICA, Ver., 18 de febrero de 2015.- Los cuatro socios ahorradores de Solidaridad y de la Delegación Departamental de Jubilados de la Sección 30, que se encuentran instalados desde el lunes en huelga de hambre desde la mañana del lunes, comienzan a reportar daños a su salud por la falta de alimentos regulares.
Desde el lunes, Raúl, Samuel y Jesús Hernández, además de Rafael Salinas, se instalaron en huelga de hambre frente a la Explanada del Parque Juárez con la esperanza de ser escuchados por parte de las autoridades y su representación sindical a cargo de Sergio Lorenzo Quiroz Cruz, en donde exigieron la intervención del gobernador del Estado Javier Duarte de Ochoa, ninguna de las peticiones ha sido concedida.
“Mi cuerpo ya está cansando”, reconoció Raúl Hernández Rosales, quien además de Samuel y Jesús Hernández, junto con Rafael Salinas, pasaron la noche del martes soportando bajas temperaturas, de apenas 12 grados, y la pertinaz lluvia que se dejó sentir en la región norte; al cumplirse con tres días de paro, la representación sindical a cargo de Sergio Lorenzo Quiroz no se ha hecho presente.
Este martes por la tarde, con la ausencia de representantes de medios de comunicación, el alcalde y líder sindical hizo un tímido gesto de atención a la problemática, sin ofrecer soluciones contundentes, sin sentarse a una mesa de negociación con los inconformes.
El gesto fue considerado como “mediático” por parte del dirigente sindical, a fin de aparentar que todo se encuentra tranquilo y que se está atendiendo la inconformidad, en tanto que Juana Muñoz Benavides, una de las manifestantes que esta mañana de nueva cuenta se colocó en bloqueo sobre el bulevar Ruíz Cortines, señaló que “fue nada más para calmar ánimos, nosotros queremos hechos”.
Los inconformes señalaron que “sólo fueron promesas, y no se resolvió nada; la prueba es que estamos aquí”, con 12 grados de temperatura y con más de 60 años encima, “a los compañeros que están en huelga de hambre no les han hecho caso, así que lo que diga Sergio, no es cierto”, expresaron.
“Empieza ya la debilidad, ya se empiezan a sentir los estragos de los alimentos, es una situación más que nada por el frío y se siente uno cansado; nos están controlando los médicos a base de líquidos, pero también nos están tomando la presión y la glucosa, pues no es fácil estar”, indica Raúl Hernández Rosales, al platicar con sus deterioradas fuerzas con los representantes de medios de información.
¿Su familia que opina? “O todo o nada”, responde un debilitado Raúl Hernández Rosales quien, junto con casi 2 mil ahorradores, desde hace dos años reclaman el pago de sus ahorros, luego del fraude cometido en por el otrora delegado Departamental de Jubilados de la Sección Número 30, Donaciano Ortíz Hernández, además de Héctor Cruz Rodríguez, líder de la organización jubilados Solidaridad.