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VERACRUZ, Ver., 28 de julio de 2015.- Al analizar la apertura a los matrimonios entre personas del mismo sexo, es necesario anteponer el respeto hacia cada persona, pero las escrituras marcan que los designios de Dios fueron establecer el matrimonio para dar certeza a la unión del hombre y la mujer, explicó el párroco de Naolinco, Rafael Gutiérrez Zapata.
“Es un tema complejo, porque implica en primer lugar tener claridad en tener respeto hacia la persona, pero cuando nosotros creemos, le damos prioridad a la sagrada escritura, donde encontramos que el matrimonio fue algo instituido por Dios y de ahí la certeza”.
El párroco manifestó que en Naolinco aún conservan un estilo de vida “recatado y tradicionalista”, pues la sociedad “se permite ser orientada por la ideología religiosa”.
Cuestionado sobre si la homosexualidad se ha hecho manifiesta entre los habitantes de este municipio, aseguró: “Aún no. En nuestras comunidades urbano-rurales todavía vivimos un esquema tradicional, observamos con cierta expectativa los acontecimientos y las decisiones, porque desde luego contemplamos la grandeza de lo que es el matrimonio eclesiástico”.
En otro tema, mencionó que una vez más los pobladores de ese municipio acudieron a la procesión en honor al padre Ángel Darío Acosta Zurita, contando en esta ocasión con la participación de más de 2 mil 500 personas, quienes viajaron al puerto de Veracruz para recordarle en la Catedral de Nuestra Señora de Asunción, ya que ahí perdió la vida mientras evangelizaba.
“Ya el padre Abel López, encargado de la causa del padre Ángel Darío, la está promoviendo y están esperando el milagro que favorezca la beatificación del sacerdote”, comentó.