Matan al sacerdote Marcelo Pérez en San Cristóbal de las Casas, Chiapas
XALAPA, Ver., 2 septiembre de 2015.- En lo que va de 2015, se han registrado 125 deslizamientos, derrumbes y deslaves en Veracruz por la saturación de suelos provocada por las fuertes y constantes lluvias, informó la Secretaría de Protección Civil (PC).
Mediante un comunicado, se informó que el pasado martes se brindó la atención necesaria por un par de derrumbes que se registraron en la carretera federal Tonalixco-Magdalena, el cual provocó la obstrucción de esta vía de comunicación.
Luego de que se presentaran estos fenómenos geológicos, de inmediato se acudió al punto para verificación correspondiente, donde se constató que no había personas lesionadas ni población en riesgo, por lo que se notificó a autoridades de la Delegación de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) para que se realicen los trabajos correspondientes.
Se explicó que a pesar de las altas temperaturas diurnas continuarán las precipitaciones en las zonas montañosas, por lo que hizo un llamado a las autoridades municipales y a la sociedad en general a extremar precauciones.
La dependencia reiteró que se trabaja con la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema), así como con las delegaciones de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), para mitigar daños en lugares donde se han registrado deslaves o deslizamientos para efectuar acciones de prevención.
Se destacó que esta labor multisectorial se ha realizado en todos los puntos donde han impactado estos fenómenos, lo cual ha valido salvar cientos de vidas, pero se reforzarán las acciones preventivas para reducir riesgos.
De igual forma, se recordó que el mes de junio ha sido el de mayor ocurrencia con un total de 43 eventos geológicos y los municipios donde más derrumbes se han presentado son: Tenochtitlán y Xalapa, con 10 cada uno; Misantla, Tlilapan y Totutla con siete, y Texcatepec con seis.
Asimismo, se recomienda a las autoridades locales que con base en los Atlas Municipales de Riesgos y experiencia en el conocimiento de los peligros en su demarcación, se deben monitorear las zonas de cerros, laderas y taludes consideradas inestables por su pendiente pronunciada, deforestación y saturación del suelo, entre otros factores; especialmente si existen asentamientos humanos en la parte baja.
Difundir los avisos de alertamiento por la llegada de frentes fríos o lluvias intensas y alertar a la población que vive en la parte baja de los cerros, laderas y taludes.
Si se observa un principio de deslave o deslizamiento (como árboles inclinados, agrietamientos de suelo, drenajes o asentamientos del terreno) en la porción alta de la ladera o talud, y existen asentamientos humanos en la zona baja, es necesario ordenar de inmediato la evacuación de la población como medida precautoria.
Además, se debe evaluar la situación de peligro prevaleciente o realizar las gestiones necesarias para reducir el riesgo de desastres; notificar a la ciudadanía que, por cuestiones de seguridad a su persona, se abstengan de efectuar trabajos de remoción de posibles escombros en caminos, puentes, carreteras y sitios de derrumbes sin la asesoría, supervisión y atención de autoridades estatales o federales.