Carlos Ramírez/Indicador político
* Toño Nemi: Otro reto
Juan Antonio Nemi Dib es un hombre sin dobleces, Se puede no coincidir con él, pero siempre habrá como respuesta una mano extendida, una palabra amable… y una defensa firme, con argumentos, de lo que él cree.
Se lo he escuchado varias veces: En la cultura política en la que él se ha formado, a un gobernador no se le dice que no. Hoy Juan Antonio se suma a una nueva responsabilidad en el proyecto político de Javier Duarte a quien, como él lo tiene claro, no le puede rechazar una invitación.
Nemi Dib inició en el actual gobierno estatal como titular del DIF Estatal. Eran los tiempos en los que la señora Karime Macías había advertido que su prioridad era la educación de sus pequeños hijos y suplir, de alguna manera, las prolongadas ausencias de su marido, por su nueva responsabilidad.
Así pues, la responsabilidad que recibió Juan Antonio no fue menor. Debía asumir el manejo de esa dependencia de manera tal que se requiriera el menor tiempo posible a la Primera Dama.
Asumió el reto con tal gusto y entusiasmo, que muy pronto la Presidenta del DIF se había contagiado de esa dinámica y estaba trabajando al mismo ritmo.
Ahí pudo haber seguido. Le gustaba lo que hacía y se escuchaban muy buenos comentarios sobre su trabajo.
De pronto se lo advirtieron: El Gobernador requería de su apoyo en otro espacio. Me llegó a confesar que no le entusiasmaba la tarea que le encomendarían, pero él no puede decirle que no a un amigo, menos si es el Gobernador.
Llegó a hacerse cargo de la Secretaría Particular del Gobernador. (Era tan bueno el ambiente en aquel entonces, que su amigo y paisano, Juan Manuel del Castillo, le dejó una fotografía en el que sería su escritorio, con una broma muy pesada).
Con el ánimo con el que suele enfrentar cada nuevo reto, en los primeros días de su nuevo encargo Nemi Dib salió a los pasillos de Palacio de Gobierno y saludó a los reporteros que ahí hacen guardia. Les agradeció sus muestras de afecto y les aclaró que mientras tuviera ese nuevo encargo, no daría declaraciones a los medios de comunicación, pues –en sus palabras- “los secretarios particulares no dan entrevistas”,
Ese nuevo encargo le duró poco. Otro conato de incendio se presentaba en la Secretaría de Salud, y allá lo mandaron.
Fiel a su costumbre y estilo, le entro de frente a los problemas… y se atascó.
Horas antes de que le fuera exigida su renuncia, hizo públicas las razones de sus desencuentros con la organización sindical de la Secretaría de Salud:
Tráfico de plazas, aviadores, venta de vales de gasolina, saqueo de medicamentos, robo de dinero de las cajas de hospitales, cuotas patronales, cobro de consultas gratuitas y paros laborales que afectaban la atención médica de las familias.
“Es una lucha de poderes artificial –dijo- encabezada por el sindicato mayoritario, que quiere mantener los privilegios al interior de Sesver y por ello recurren al chantaje y manipulación de los agremiados”.
Sólo una cosa le pidió Juan Antonio Nemi Dib a Érick Lagos, entonces secretario de Gobierno y comisionado para recoger la renuncia del titular de Salud. “Dile al Gobernador que me reciba. Yo no tengo problemas en entregar mi renuncia, pero quiero tener la oportunidad de hablar con él”.
Nemi Dib recibió esa oportunidad, la reunión se realizó y se prolongó y al despedirse quedó el compromiso de que volverían a trabajar en otros proyectos.
Hoy se da esa oportunidad.
El Consejo Estatal de Seguridad Pública fue concebido como un ente meramente burocrático, que documenta los esfuerzos que se hacen en la entidad en materia de seguridad y los envía al Consejo Nacional.
Su función es gris… o lo era.
Seguramente tendrá otro color una vez que Toño Nemi le meta mano.