José Ureña/Teléfono rojo
Ratificar la ventaja
Con seguridad muchos siguen nerviosos, pero poco a poco, cada día que pasa, se va confirmando que contra la estridencia mediática y el discurso de la violencia, el mejor antídoto es el de las propuestas constructivas, el de la búsqueda de soluciones, en lugar de revanchas.
Héctor Yunes concluye su período de precampaña al frente de las encuestas sobre la intención del voto que se realizan en Veracruz, y con una tendencia sólida a la alza.
Los estudios de opinión muestran que, en su mayoría, los veracruzanos optan por un gobernante que llegue a construir, que llegue a reactivar la economía, que llegue a poner orden en la administración pública, y no por uno que sólo prometa cárcel para sus antecesores, como si esa fuera la solución mágica para los grandes retos que enfrenta la entidad.
Aunque no dio detalles sobre el origen de sus cifras, el periodista José Ureña (aquel que dio como un hecho la anticipada salida de Javier Duarte del Gobierno de Veracruz) comentó esta semana que Héctor Yunes Landa marcha al frente de las encuestas con 29.32% de intención del voto, contando sólo a quienes le apoyarán marcando con una cruz el escudo del PRI, por lo que habría que sumar lo que le agreguen los partidos aliados, el Verde Ecologista (PVEM), Nueva Alianza (Panal), Alternativa Veracruzana y Partido Cardenista.
La versión coincide con lo expresado por el dirigente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, en su más reciente visita al puerto de Veracruz, cuando aseguró que el aún precandidato tricolor marchaba a la cabeza de las mediciones.
Según Ureña, el precandidato de la alianza PAN-PRD, Miguel Ángel Yunes Linares se ubica cuatro puntos abajo del priista, con 25.84% de las preferencias y se percibe un creciente rechazo por parte de los grupos más conservadores de los partidos que lo abanderan.
En la tercera posición se coloca Cuitláhuac García, el candidato de Morena, que suma un 11.31 por ciento.
Este es un dato importante, pues para los analistas políticos está claro que la carrera de este joven diputado federal con licencia no es por la gubernatura del 2016, sino en realidad por la del 2018.
De todos los que compiten por la gubernatura este año, Cuitláhuac García es el único que, en caso de no ganar, estaría en condiciones de volverlo a intentar dentro de dos años, con la ventaja, para ese entonces, de que ya será conocido en todo el territorio veracruzano y estaría haciendo campaña al mismo tiempo que su dirigente nacional, Andrés Manuel López Obrador, quien buscará una vez más la Presidencia.
Por lo pronto, cuando falta menos de un mes para que inicien las campañas formales, y a pesar del «lastre» que -como él mismo lo ha señalado- significa la imagen negativa del Gobernador Javier Duarte, Héctor Yunes Landa se mantiene al frente de las preferencias y ha conseguido penetrar en la conciencia de los veracruzanos a partir de propuestas constructivas y de contrastar su prestigio, su trayectoria, con la de sus contrincantes.
Falta, sin embargo, algo que es fundamental: Debe trabajar en la activación de la poderosa estructura electora del PRI, la que ha producido contundentes victorias en momentos en los que la percepción popular remitía a aparatosos descalabros.
Movilizar al llamado «voto duro» es fundamental para que Héctor Yunes confirme en las urnas lo que hoy muestran las encuestas.
En esa tarea se debe concentrar durante el lapso entre su ratificación como candidato y el inicio de su campaña.
*Este texto es responsabilidad absoluta del autor.