Andi Uriel Hernández Sánchez/Contrastes
De nuevo, Américo
¿Qué se le puede objetar al joven alcalde de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez? Ahora, ayer, ante un bloqueo de la carretera a la congregación El Castillo-6 de Enero que realizaban vecinos de tres poblados del municipio, ante la imposibilidad de pasar en su camioneta jaló de una motocicleta, se metió entre los carros que estaban parados y llegó al punto de la protesta, dialogó con los vecinos y éstos abrieron la vialidad de inmediato.
Tal vez en el PRI y en el Gobierno del Estado nadie repare que esta es la mejor forma, y acaso la única, de convencer al electorado para que vote a favor de la causa: con resultados. Si en general toda la población veracruzana tuviera respuestas inmediatas a sus demandas otro gallo le cantaría a los tricolores, pero para ellos, tristemente, casos como el de Américo son verdaderas peras del olmo.
Cuando Américo aspiraba a la alcaldía, en “Prosa aprisa” lo critiqué porque fui testigo cuando frente a Plaza Crystal desplazándose en una moto pasó sobre unas boyas preventivas y se pasó un alto para enfilar a toda velocidad por la avenida Lázaro Cárdenas con rumbo a Banderilla-Ciudad de México. Dije que alguien que no respetaba las normas no podía aspirar a gobernarnos. Con el tiempo supe que iba a una cita, que ya se le había hecho tarde y había un atasco –como dicen en España– y que para no quedar mal tuvo que hacer lo que hizo.
Hoy tengo que reconocerle su eficacia, pero que además dé la cara, enfrente a sus representados, dialogue con ellos y les ofrezca respuestas concretas, así como que no vea obstáculos, como ayer, para cumplir bien con su responsabilidad. ¿Se imaginan al exquisito alcalde del puerto de Veracruz, por ejemplo, Ramón Poo Gil, desplazándose en moto para ir presto a resolver un problema? (testigos me platicaron que en su campaña le costaba saludar de mano a la gente humilde y que cuando lo hacía de inmediato se las lavaba).
Pero si uno ata cabos, el bloqueo se lo armaron a propósito, pues una noche anterior a través del Twitter había informado que había tenido una reunión con los agentes de las congregaciones municipales, esto es, que los está atendiendo, sin embargo el de Chiltoyac se prestó al alboroto pues no informó de ello y de paso no hizo nada por desactivar el borlote. ¿Es la respuesta de quienes están viendo afectados sus intereses por las decisiones que está tomando a favor de la población?
Por lo demás, me gustó también que ayer Américo ya dijo que las decisiones que tome su gobierno con respecto a un gasoducto que pretenden que pase por Xalapa no serán a espaldas de la sociedad. Su postura me habla de que no está a la espera de que le ofrezcan un moche para que se haga de la vista gorda y se quede callado. Insisto: hay que respaldarlo.
Penchyna: no, pero sí
Habría que aclarar y precisar: el senador hidalguense priista David Penchyna Grub vino a Xalapa el lunes y en sus declaraciones a la prensa no negó sino que reconfirmó que la Procuraduría General de la República (PGR) está investigando a funcionarios y exfuncionarios de la actual y de la pasada administración estatal por el mal uso que hicieron de recursos públicos, según denuncia presentada por la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
Pero qué consuelo. Declaró que los priistas votaron el 6 de mayo en el Congreso de la Unión un punto de acuerdo presentado por el senador panista veracruzano Fernando Yunes Márquez para que la PGR agilice las investigaciones pero sólo para romper “el fuego político” con el que se pretendía golpear al gobernador Javier Duarte de Ochoa.
Penchyna por parte de los senadores priistas y Alejandro Montano Guzmán por parte de los diputados federales veracruzanos tricolores dieron su visto bueno a la propuesta de Yunes Márquez, aunque con ello en realidad no rompieron ningún “fuego político” sino más bien le hicieron el juego al senador blanquiazul porque al menos en Veracruz la repercusión mediática tuvo el efecto contrario al que dice Penchyna que perseguían ya que se resaltó en los medios que eran los propios priistas los que estaban exigiendo actuar contra los priistas funcionarios y exfuncionarios veracruzanos acusados de corruptos.
Pero incluso si se hubiera logrado el efecto de romper ese “fuego político” del panista, esto es, si surtió efectos el darle el avión… por el momento, lo de fondo es que el propio Penchyna, priista “reconoció que no sólo se está investigando a funcionarios de la actual administración estatal, sino también de la pasada; en ese sentido, aseveró que con punto de acuerdo o no se están haciendo las investigaciones…” (Nota de Javier Salas Hernández, de alcalorpolitico.com 25/052015).
Qué alivio para los acusados: no te preocupes, está loquito, déjalo, le diré que sí a lo que pide para que te deje de estar molestando, pero de que te están investigando, te están investigando, aunque él no lo hubiera pedido. En realidad Penchyna no vino a tratar de salvar a nadie, a exonerar a ninguno y en cambio dejó el velo de la sospecha en el aire. No me defiendas compadre.
Una buena noticia hubiera sido: no hay de qué preocuparse, está comprobado que todos son unas blancas palomas, el senador panista hará el ridículo, yo meto al fuego las manos por ustedes, Veracruz es el paraíso de la transparencia y la buena rendición de cuentas, aquí no se ha tocado un solo peso ni con el pétalo de una rosa, etcétera.
Penchyna fue congruente con su postura en tribuna aquel 6 de mayo. Leí completa su intervención (se la solicité al otro día y me la hizo llegar Montano Guzmán) y su posición entonces fue muy clara.
“Venimos como priistas a favor de esta propuesta porque nosotros lo que queremos es que se aplique el estado de derecho”. Recordó que la ASF “es un órgano del Poder Legislativo, concretamente de la Cámara de Diputados, que lo elegimos nosotros, para su función”.
Se volcó entonces en reconocimientos para el titular de la ASF, Juan Manuel del Portal, de quien dijo que lo eligieron cuando él era diputado federal, que se trata de “un equipo de profesionales… que creo que los distingue su profesionalismo, su capacidad técnica probada a lo largo de muchas décadas, que es el caso del auditor superior de la Federación”.
Señaló aquel día que el auditor había observado recursos federales de diferentes ejercicios fiscales y que había consignado el respectivo expediente a la PGR. “Nosotros vamos a favor”.
El único pero que tuvo es que “pareciera que queremos establecer plazos legales”. Dio a entender, aunque se dirigió a ellos “con respeto y con cariño”, que los panistas quieren presionar a la Procuradora General de la República, Arely Gómez. “Intentar marcar plazos, eso sí ya es otro boleto, yo no me prestaría a ello. Ni en este caso ni en ninguno”.
Pero pidió darle seguimiento al caso. Dijo algo contundente: “Un exhorto que si no lo hiciéramos no le quita la obligación y la responsabilidad a la PGR de hacer lo que tiene que hacer, pero nosotros queremos dejar claro, como priistas, que no tenemos nada que esconder, que quien haga mal uso de los recursos, llámese como se llame, en este país debe ser un compromiso de todas las fuerzas políticas por dar una batalla, en los hechos, por la transparencia”.
Insistió y remató: “Estamos a favor sin dudar de lo que hizo profesionalmente la Auditoría Superior de la Federación y de lo que estoy seguro hará la Procuraduría General de la República en los plazos que determina la ley, no en el contentillo del fragor electoral”. Penchyna, no hay que olvidarlo, es gente del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.