Raúl López Gómez/Cosmovisión
Duarte no escatima reconocimientos para Pepe
El gobernador Javier Duarte de Ochoa no escatimó ayer palabras de reconocimiento al senador José Francisco “Pepe” Yunes Zorrilla por el apoyo que le está dando a su gobierno para restructurar la deuda pública y poder cumplir todas las obligaciones financieras que tiene su administración.
Al abrir semana con la conferencia de prensa que, cuando puede, ofrece los lunes a temprana hora, ayer el gobernante confirmó lo que un día antes había anticipado el senador de que la deuda del estado implicaba una restructura y que los términos ya se negocian con las instancias federales correspondientes desde la semana pasada. “Ya tuve la oportunidad de estar la semana pasada con el director de Banobras. Mañana (el lunes, ayer) estaremos con el área de Hacienda encargada de la reestructura”, dijo Pepe quien explicó que la restructura implicará “pedir recursos, alargar plazos y negociar tasas”.
Por eso era obligada la pregunta ayer y Duarte dijo una gran verdad: que la restructuración es facultad y responsabilidad de su administración y por eso le agradeció al presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público del Senado, a nombre de toda la sociedad veracruzana, lo que calificó como una desinteresada intervención, pues “es verdaderamente importante el apoyo que cualquier senador nos pueda dar para la gestión de recursos, para la liberación del flujo de recursos, para de esta manera cumplir de mejor manera con los compromisos que tiene la entidad, el gobierno particularmente, con diferentes actores económicos y sociales”.
“Así que primero que nada mi agradecimiento al senador por sus gestiones, que son muy bienvenidas, para poder hacer llegar al Gobierno de Veracruz de mayores recursos que nos permitan acelerar el crecimiento, el desarrollo y el cumplimiento de nuestras obligaciones en todos los sentidos”.
Caray, cómo son las cosas en la política. En las últimas fechas el gobernador ha sido bastante deferente con el legislador y no ha escatimado reservas al grado de haber expresado a “Prosa aprisa” que “Diga lo que diga, haga lo que haga, Pepe (Yunes Zorrilla) es mi senador y es mi amigo. Yo sé que cuento con él como él sabe que cuenta conmigo”.
Digo que cómo son las cosas, porque las expresiones se han dado en medio de una diferencia y distanciamiento político a raíz de la aprobación en diciembre pasado de la gubernatura de dos años a partir de 2016, que tal vez si estuvieran en los mejores términos no se darían o al menos no se expresarían públicamente. Casi hasta dan ganas de proponer que dado el bien común que buscan ahora que no se llevan, como es rescatar las finanzas estatales para pagar adeudos, pues mejor que sigan con su bronca porque nos puede ir mejor a los veracruzanos, o sea, aquí sí vale aquello, aunque al revés, de que parece que cuando estaban mejor estábamos peor.
Duarte se defendió respecto al monto de la deuda total. Para él la deuda oficial es la registrada en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, arriba de los cuarentaitantos mil millones de pesos, y para él todo lo que se adeuda por fuera, a los proveedores, a los contratistas y a los proveedores de servicios, se debe al “flujo de operaciones” diarias y “cada quien puede tener las cuentas que quiera en tema de pasivos con proveedores, contratistas y demás”. No dio cifras ni un estimado, así que podemos seguir poniendo números, dígitos, a nuestro gusto.
En resumen, a mi juicio, dos cosas resaltan: el encendido reconocimiento del gobernador al senador incluso expresado “a nombre de toda la sociedad veracruzana”, lo que no es un reconocimiento menor, y el hecho esperanzador de que ya se trabaja para restructurar la deuda para pagar lo que se debe, que eso es lo que finalmente le interesa a todos los veracruzanos, tanto a los que se les debe como a los que no, estos últimos porque indirectamente recibirán los beneficios, por ejemplo en forma de empleos.
Ayer me dio la impresión de que hubo quienes interpretaron ese “sin embargo, es responsabilidad nuestra (la restructura) y lo estamos haciendo con toda la seriedad y la importancia que esto conlleva” como que Duarte quería alejar a Pepe del tema, pero lo cierto es que Yunes Zorrilla no es el responsable sino en este momento un coadyuvante responsable para resolver el problema.
Me pregunto por qué tanta deferencia de Duarte para con Pepe. ¿Acaso por el sólo hecho de su ayuda para lograr la restructura y gestionar recursos? ¿Es que acaso hay mar de fondo… político en su actitud? ¿Qué sabe o por qué?
Carrachos, pero bien dice un dicho que en política los aplausos siempre son en contra de alguien.
Ayer también, el otro senador priista, Héctor Yunes Landa, en lugar de sumarse al par en sus gestiones abordó por primera vez el tema, tanto en el puerto de Veracruz como en Orizaba, pero para decir que «Hay una danza de números impresionante; se habla de una deuda de menos de 50 mil, de una de 80 mil, hay quienes han hablado de 104 mil millones de pesos”.
Héctor calificó a la deuda como “un lastre” y no se anduvo por las ramas al afirmar que “refleja debilidad política”, ante lo cual, en una actitud crítica que no se le veía desde febrero pasado cuando visitó al gobernador en la Casa Veracruz, exigió al gobierno que pague los adeudos, pues de ser el próximo mandatario su gobierno no será una caja de pagos, según una nota de J. J. Enríquez, corresponsal de Radiover en Orizaba.
En el puerto jarocho dijo que las cifras que se deben a los proveedores no se conocen y que desde tiempo atrás intenta conocer la deuda que guarda la administración estatal pero «no es fácil», según reportó Joel Cruz, de XEU Noticias.
Llama la atención que Yunes Landa no haya salido a decir que sumará esfuerzos sino que hay “una danza de números impresionante”. Pero no se cree que tenga celos por el trato que le están dando a su par en el Senado. ¿O usted que cree?
Buganza provocará desbandada en el PRI
La que se pensó que sería ayer una comida del aspirante a candidato independiente a la gubernatura del estado, Gerardo Buganza Salmerón, sólo para cumplir un compromiso con un grupo de columnistas, cobró tanto interés que se prolongó hasta la noche, y de la reserva inicial que guardó pasó al diálogo abierto y revelador, con un gran esbozo de lo que será su candidatura y lo que hará y dirá. Todos salimos con la certeza de que llegado el momento impactará a la opinión pública y seguramente despertará mucha simpatía entre los veracruzanos.
Algo que se puede adelantar es que su movimiento provocará una seria desbandada en el PRI pues muchos activos del tricolor pasarán a las filas independientes para contender como candidatos a diputados locales, ellos o familiares suyos, cansados de ser buenos militantes, bien aceptados entre la ciudadanía pero excluidos por los grupos que llegan al poder y que sólo favorecen a unos cuantos incondicionales sin mayores méritos y muy cuestionados.
Buganza será noticia y hará de la próxima contienda un proceso electoral muy interesante.