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XALAPA, Ver., 3 de junio de 2015.- Un juego de cubiertos italianos de la marca Christofle, con valor de casi 67 mil pesos, un bote de basura de mil 600 pesos y un cuchillo para cortar pan de 2 mil 29 pesos, son sólo algunos de los regalos de bodas que pidió el secretario de Desarrollo Económico del Estado, Erik Porres Blesa, quien contrajo nupcias el pasado 30 de mayo con Marisol de la Miyar Martínez.
Mientras la situación económica del estado se encuentra cada vez más deteriorada, en la página del Palacio de Hierro se muestra la solicitud de regalos con el número de evento 279734, registrada a nombre de los recién casados, cuyo monto asciende a más de 373 mil 500 pesos, lo que equivale a más de cinco mil días de salario mínimo de un trabajador veracruzano.
Según el reporte del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) en Veracruz, durante 2012 había más de 4 millones de pobres, que equivale a 52.6 por ciento de los habitantes en el estado; asimismo, hay más de un millón 122 mil personas en pobreza extrema.
Estas personas no pueden ni soñar con los cubiertos de 67 mil pesos, que equivaldrían a más de 52 canastas básicas en Veracruz, cuyo precio en marzo llegó a mil 283 pesos, según datos del Coneval; otras excentricidades que el secretario de Desarrollo Económico pudo permitirse fueron dos especieros de la marcha Küchenprofi con un valor de 3 mil 433 pesos, 9 juegos de copas de 9 mil 420 pesos, un horno de gas de 9 mil 674 pesos, manteles para comedor e individuales de 12 mil 854, una cafetera de 21 mil 526 pesos y comedor con sillas de más de 41 mil pesos.
Porres Blesa también pidió a sus invitados aportar en la comodidad de sus aposentos maritales con un sistema de cine en casa de 21 mil 119 pesos, una televisión de 39 mil pesos y para estar completos, un mueble para la televisión de 13 mil pesos y un sillón de 16 mil. Asimismo, solicitó dos mesas que suman 25 mil 119 pesos, un comedor de 26 mil 900, sillas de 16 mil 420 y una lavasecadora de 26 mil 299 pesos.
El único regalo que un trabajador veracruzano con salario mínimo en zona A podría permitirse es el de un servilletero de aro con valor de 70 pesos, pero el secretario de Desarrollo Económico pidió 12 de ellos.